BENIDORM. La denuncia está presentada, el PSPV espera que la Junta Electoral mueva ficha y el PP ha defendido el proceso. Pero, ¿qué hay detrás de la denuncia de los socialistas por las supuestas irregularidades en el voto por correo de Finestrat? Según han denunciado este martes, esos votos estarían domiciliados en la sede del PP y en los domicilios de los candidatos del PP, algo que en principio no es ilegal. Sin embargo, el PSPV describe una especie "engranaje" entre los afiliados del PP y un funcionario de Correos, con los que existiría una especie de connivencia para llevar a cabo la recogida de los votos, en puntos y horas concretas, y que los ejercientes de ese derecho -en su mayoría, se trataría de personal ligado al ayuntamiento- cumplieran una serie de directrices. Y sostienen los socialistas que puede haber fraude en la entrega de esos sufragios por vía postal. En su denuncia, el PSOE cita nombres, describe el modus operandi, pero no desvela -o no tiene pruebas- a cambio de qué y por orden de quién se lleva a cabo esta operación. Y recuerda que el voto por correo de Finestrat supone el 16% de los votos contabilizados. Y no de las últimas elecciones, o de este proceso electoral, ahora en marcha, sino que es una práctica que se viene dando desde 2017, "con una cifra que es el triple del voto a escala nacional". Es decir, que según los socialistas, entre 300 y 400 sufragios de los 2.500 que se registran en cada proceso electoral.
Y, ¿cómo sería el modus operandi? Según la denuncia, "ese voto por correo vendrían siendo manipulados directamente desde la sede del Partido Popular por diversas personas cuya autoría aún desconocemos, pero sin duda afiliados al Partido Popular de Finestrat puesto que los votos se domicilian y recepcionan directamente en las dos sedes de dicho partido político, y sería entregado principalmente por dos personas (que los socialistas sí tienen identificados)". A las sedes del PP de Finestrat, tanto del centro urbano como de la zona de la playa, acudirían las personas solicitantes de ese voto por correo.
El PSPV explicaría que para ello existe la connivencia del operario de Correos de Finestrat, que acude directamente a estas sedes, "con la caja preparada con los votos por correo y obviando aparentemente el trámite de entrega en los domicilios de los destinatarios". Es decir, según los socialistas, existe una connivencia para hacer coincidir la llegada del operario de Corres con la caja de los votos y la espera de los solicitantes, citados por estos dos afiliados del PP.
A ello se suma otra ubicación; el estanco de Finestrat, ubicado en la Avenida Benidorm. Según la denuncia, el operario de Correos habría venido haciendo entrega de cajas enteras de votos por correo en el estanco de Finestrat con la finalidad de obviar una vez más el trámite de la entrega en el domicilio de la sede del PP". Añade la denuncia que "el estanco de Finestrat sería propiedad del dueño de un establecimiento hotelero, ubicado en la cala de Finestrat, donde el Partido Popular prepara sus acontecimientos y se reúne para celebrar el inicio de la noche electoral".
Y tras describir esta operativa, el PSPV insiste en denunciar que "dichos votantes por correo son en su gran mayoría personas que depende directa o indirectamente del Ayuntamiento en cuanto al ejercicio de sus funciones o en cuanto a su salario, y que podrían todos y muchos de ellos haber recibido presiones, coacciones, amenazas o incluso promesas de precio o recompensa por y para votar al Partido Popular de Finestrat".
Por todo ello, el PSPV de Finestrat pide que esos votos sean anulados, o al menos, apartados del recuento de la noche del 28M, a la espera de que quede esclarecido todo el proceso de entrega a tenor de las anomalías y sospechas la candidatura local tiene. Hay que recordar que los socialistas pide a la junta electoral que deduzca testimonio en caso de que se confirmen las anomalías y remita el caso a un juzgado ordinario. El PP ha defendido la legalidad de todo el proceso.