ALICANTE. Guido Carrillo se mantiene como duda para el partido ante el Rayo Vallecano. El delantero argentino del Elche, al igual que su compatriota Lucas Boyé, no entrenaba junto a sus compañeros este martes, a tres días para la disputa del encuentro.
Lo anterior supone un problema mayor al que tuvo que enfrentarse Francisco Rodríguez de cara a la visita a Sevilla de la semana pasada, toda vez que entonces tenía disponibles a Carrillo y Pere Milla como delanteros. Ahora cuenta con el ilerdense y Ezequiel Ponce, también delantero uyque ya parece claro que tendrá el alta competitiva para el viernes tras completar otra sesión de trabajo con normalidad, pero que viene de casi cuatro meses de inactividad...
El club franjiverde, fiel a su política de no dar pistas al rival, no ha hecho público parte médico alguno sobre el estado de Carrillo (tampoco de Boyé). Sin embargo, Cope Elche desvelaba el lunes que Carrillo sufre un golpe en el lateral del cuádriceps de una de sus piernas, dolencia que le llevó ese día a la piscina y a trabajar este martes con los readaptadores en el Díez Iborra, escenario de la sesión de entrenamiento del equipo. Por lo que se refiere a Boyé, este también tiene problemas en uno de sus cuádriceps, concretamente un edema que ya le impidió estar en disposición de jugar ante el Sevilla.
Para la cita contra el Rayo Vallecano, que llega al Martínez Valero después de tres derrotas consecutivas en una LaLiga Santander en la que no conoce la victoria desde el 18 de diciembre, el Elche no podrá contar seguro con el lateral Helibelton Palacios por lesión (tampoco hay parte médico al respecto, aunque Francisco trasladó en su última comparecencia de prensa que se había lesionado en los músculos isquiotibiales) y el central Gonzalo Verdú y el mediocentro Gerard Gumbau por sanción.