ELCHE (EFE). El entrenador del Elche, Pablo Machín, afirmó este viernes, en rueda de prensa, que su equipo, a pesar de su crítica situación en la tabla, llega en un buen momento al partido en el Martínez Valero ante Osasuna, rival ante el que espera competir y sumar el primer triunfo de la temporada.
El preparador soriano admitió que Osasuna puede tener un mayor desgaste físico tras haber disputado la Copa del Rey esta semana, si bien advirtió de que “la cabeza y la mentalidad son súper importantes y haber pasado de ronda ante un gran rival seguro que subsana todo el cansancio”.
El técnico aseguró que el Elche demostró en Cádiz “que puede competir ante cualquier rival" y elogió la aportación al equipo de los jugadores que salieron desde el banquillo, como Lautaro Blanco, Eze Ponce o Fidel Chaves.
“Siempre digo que quiero ver ventajas y frescura en los que salen cuando el rival está más cansado. Hay un plan A, pero también tiene que haber un B y un C dependiendo de las circunstancias”, explicó.
Machín pidió al entorno que, pese a la situación del Elche, “vea el vaso medio lleno porque no ganamos nada siendo pesimistas” y recordó que otros equipos, en una situación tan delicada, lograron evitar el descenso.
El entrenador del Elche elogió la “estabilidad” por la que atraviesa Osasuna, que tuvo su origen deportivo en el apoyo que recibió su entrenador, Jagoba Arrasate, de todos los estamentos de la entidad en un momento de debilidad.
“Han mejorado su modelo de juego, potenciando al equipo con jugadores de la cantera. Tiene la moral súper alta y jugadores que se identifican con el club. Cuentan con una defensa difícil de batir y arriba con gente determinante. Es difícil de ganar, pero seguro que es posible y creo que lo vamos a hacer”, argumentó Machín.
El técnico indicó que vencer a Osasuna le dará al Elche “un poco de tranquilidad” porque necesita “sumar de tres en tres”, si bien precisó que no deben obsesionarse.
“No queremos que esa sobre motivación nos lleve a ser un equipo cohibido que no puede rendir a su nivel”, añadió.
El soriano reconoció que, pese a saber la dificultad de la empresa, ya que debía cambiar la dinámica del equipo, esperaba mejores resultados desde su llegada al Elche, ya que solo ha sumado un punto de nueve, si bien dijo estar contento “con el proceso”.
“Tengo la conciencia tranquila de que hago lo que puedo y de que se está realizando un buen trabajo. Lo que necesito lo tengo. Ellos (los jugadores) me creen y están demostrando que quieren. Y eso es lo básico”, argumentó.
“Los números dicen que estamos mejorando desde nuestra llegada, pero en el fútbol lo que decide es la eficacia en las dos áreas. Hay que mejorar en la definición”, apostilló el técnico.
Machín no quiso valorar la polémica arbitral tras la reciente impugnación del pasado partido por parte del Cádiz y se mostró agradecido a la afición por su apoyo.
“Están siendo del Elche en las buenas y ahora en las malas. Me comprometo en nombre de los jugadores a que no vamos a bajar los brazos en ningún momento y que vamos a ser un equipo guerrero y ambicioso”, concluyó.