El turismo Mice, a debate en Alicante: la ciudad debe aspirar a eventos de tamaño medio 

ALICANTE. El pasado 14 de octubre se celebró a cabo el seminario Turismo MICE, segmento estratégico de desarrollo en la ciudad de Alicante en el Salón de Grados de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Alicante, dirigido tanto a profesionales como a estudiantes interesados en explorar las oportunidades en el sector, en el marco de la Cátedra Turismo Ciudad de Alicante.

En una coyuntura en que la excelencia se ha convertido en la herramienta fundamental para posicionar los destinos turísticos, en una industria en la que la competencia es cada vez mayor también entre ciudades, el Ayuntamiento de Alicante, en el marco de la Cátedra Turismo, Ciudad de Alicante, se plantea la oportunidad de profundizar en el análisis de un segmento turístico fundamental: el Turismo MICE -reuniones, incentivos, congresos y exposiciones-, que representa un complemento muy sólido del turismo tradicional de sol y playa, que ha sido el motor económico de Alicante durante décadas, así como un segmento fundamental para la diversificación y desestacionalización del turismo tanto nacional como internacional, mediante este seminario en el que han participado Ana Poquet, concejala de Turismo y Playas del Ayuntamiento de Alicante; Juan Llopis, director de Relaciones y Proyectos Institucionales de la UA; Diego Ramírez, director en Hotel Boutique Calas de Alicante, y moderador del seminario; Mar Sáez, Directora de Alicante Convention Bureau; Francisco Fresno, presidente Asociación para promoción del Turismo Deportivo; Pablo Torres, experto en Turismo y director de Teduka; Miguel March, responsable Hosbec Business; Ángel Rodríguez, director general Meliá Alicante; Luis Castillo, empresario y presidente de APHA (Asociación Provincial de Hoteles y Apartamentos Turísticos de Alicante); Jorge Rodríguez, CEO ESATUR; Óscar Carrión, director de Gastrouni; Reme Cerdán, secretaria Comisión Turismo CEV; Ana Segura, vicepresidenta. Colegio Oficial de Médicos, cuyas conclusiones fundamentales detallamos a continuación.

Al atraer a profesionales y empresas, la ciudad diversifica su perfil de visitantes, incrementando la afluencia de turistas en busca de experiencias más variadas y de mayor valor añadido. Este sector permite que Alicante destaque en el mapa internacional como un destino no solo de ocio, sino también de negocios, ciencia y cultura, en el que tanto el Ayuntamiento como la Universidad desempeñan una labor fundamental.

La ciudad de Alicante, por tanto, debe aspirar a ser uno de los principales centros de turismo MICE de nuestro país, al menos en eventos de tamaño medio hasta que dispongamos del gran palacio de congresos que nos permita competir en la división de honor del turismo MICE, cuyo gasto medio por viajero triplica al turismo tradicional, con importante efecto desestacionalizador y de captación de posteriores visitas a la ciudad, y para el que tenemos capacidad demostrada de gestión, clima, entorno, así como infraestructuras, especialmente con el gran paso dado hacia la construcción del próximo Palacio de Congresos, para competir en la gran liga del sector. Infraestructuras que deberíamos completar en los próximos 4 años, como la capacidad hotelera y hostelera para atender grandes eventos congresuales y gastronómicos, como resaltaba el presidente de APHA.

Disponemos de una oferta hotelera de alta calidad, aunque aún insuficiente, un clima excepcional, buenas conexiones para desplazamientos, que deben mejorar sensiblemente con el Corredor Mediterráneo y la conexión ferroviaria Alicante/Aeropuerto, así como una tradición hospitalaria muy consolidada y buenos centros de formación , tanto a través de la Universidad como del CDT y otras propuestas privadas, teniendo claro que esa formación es necesaria a todos los niveles, no solo para los directivos del sector.

Tenemos, por tanto, puntos de mejora, pero partiendo de la premisa de que lo estamos haciendo bien, como muestra el reconocimiento a nuestra posición en turismo.

En la inauguración del seminario, la concejala de Turismo y Playas, Ana Poquet, mostraba el “compromiso del Ayuntamiento de Alicante con el turismo MICE a través del trabajo del Patronato de Turismo Alicante City&Beach, que facilita la imprescindible colaboración público-privada para potenciar la captación de estos eventos, ya que aportan un elevado impacto económico y suponen un factor clave en la desestacionalización turística, a la vez que expanden nuestra posición entre un turismo de alto nivel permitiendo, además, organizar actividades paralelas asociadas, tanto para congresistas como para acompañantes, que mejoran el impacto económico y social del evento, a la vez que permiten mostrar otros aspectos de la ciudad para visitas futuras de los congresistas. Posición que mejorará sustancialmente con el previsto nuevo Palacio de Congresos que complementará las infraestructuras actuales”.

El director de Relaciones y Proyectos Institucionales de la UA, Juan Llopis, explicaba que “Alicante cuenta con una serie de fortalezas competitivas para este tipo de turismo, además de su clima extraordinario que permite organizar eventos en cualquier época del año. Tenemos una ciudad diversa, que combina la cultura que la conecta con su territorio, así como un carácter cosmopolita y moderno, favorecido, entre otras cosas, por el propio turismo, por la Universidad y la EUIPO, destacando como uno de sus valores la gastronomía, capitalizando una cocina con identidad propia y la presencia de restaurantes de mucho prestigio avalados por estrellas Michelín y soles Repsol, tanto en la ciudad como en su entorno próximo”.

El moderador de la jornada, Diego Ramírez, apuntaba que “Alicante ha experimentado un notable incremento en la organización de eventos, con más de 200 en el último año, con algunos sectores clave en el apoyo de este tipo de turismo de alto nivel, como el tecnológico, el farmacéutico, el directivo transversal o el de la investigación académica y aplicada, impulsando notablemente la economía de la ciudad”.

En palabras de Luis Castillo, presidente de APHA, “uno de los mayores desafíos del sector turístico es la estacionalidad. Sin embargo, el turismo MICE tiene la particularidad de concentrarse en temporadas que tradicionalmente son más tranquilas, como primavera y otoño. Esto contribuye a mantener un flujo constante de visitantes a lo largo del año, beneficiando a la economía local mediante la generación de empleo continuo y la reducción de la dependencia del turismo estival.”

Y sobre el nuevo Palacio de Congresos, la directora de Alicante Convention Bureau, Mar Sáez, decía “se trata de una infraestructura fundamental para posicionar a la ciudad entre las líderes del turismo MICE en España. Tenemos algunas muy importantes, como el Palacio de Congresos de Colegio de Médicos, la Universidad o el ADDA, este último cubriendo algunas funciones que no le son específicas, ya que se trata de un auditorio de música, lo que relega su prioridad para congresos, además de sus limitaciones en salas anexas exigidas por muchos eventos”.

Pero, efectivamente, mejorar nuestra posición en turismo de congresos con el futuro nuevo Palacio, requiere de nuevas, más y mejores infraestructuras de todo tipo vinculadas en gran medida a la iniciativa privada, como apuntaba Jorge Rodríguez, CEO de Esatur, y ratificaba Reme Celdrán, de la CEV, “tenemos lo único que no se puede comprar, las bondades del territorio (clima) o excelentes infraestructuras de comunicación, pero necesitamos más hoteles de alto nivel que, como matizaba Ángel Rodríguez, director general de Meliá Alicante, “no necesariamente tiene que ver con el número de estrellas del hotel, sino con su capacidad para atender las necesidades de estos clientes (espacios, formación de las personas, criterios de sostenibilidad, etc.)”.

Jorge incidía, además, en la importancia de potenciar la marca Alicante como una marca reconocible con atribuciones idóneas también para el turismo de congresos, que ratificaba Pablo Torres, director de Teduka, incidiendo en la importancia de tomar referencias de ciudades comparables, como Málaga, sin frustarnos por no alcanzar a otras como Madrid o Barcelona que, evidentemente, están a otro nivel.

La vicepresidenta del Colegio de Médicos de Alicante, Ana Segura, ponía en valor, como antes lo había hecho la directora de Alicante Convention Bureau, el Palacio de Congresos del Colegio, con capacidad para más de 600 personas en su sala principal, y 19 salas anexas para todo tipo de actividades paralelas, y cuyo objetivo es básicamente promocionar Alicante como punto de encuentro.

En este punto, tanto Francisco Fresno, presidente de la Asociación para la Promoción del Turismo Deportivo, como el Director de Meliá Alicante, insistían en la colaboración público/privada como una de las claves del éxito del turismo de congresos, así como en la realización de congresos y reuniones vinculados a los eventos deportivos (congresos de nutrición, etc.).

Un punto de coincidencia de todos los ponentes era la necesidad de entender lo que el turismo de congresos exige en cada momento, que va cambiando con el tiempo. Esta es la época de la sostenibilidad, con la que tanto el destino como cada uno de los establecimientos asociados al turismo, debe ser consecuente (ahorros de agua y energía, reciclaje, transporte público eficiente, etc.).

Un complemento importante en el turismo MICE que refuerza la apuesta del destino por el mismo, es que los asistentes frecuentemente vienen con acompañante, lo que exige un programa social paralelo, que apoya la puesta en valor de la ciudad e incrementa el gasto turístico.

Como es importante, decía Pablo Torres, el dato para la toma de decisiones en turismo MICE (“el dato mata al relato”), y no siempre se dispone de los datos relevantes.

Finalmente, a preguntas de los asistentes, se debatió en torno a la importancia de la tecnología en turismo, concluyendo que, especialmente desde la pandemia, el sector se había puesto las pilas con este tema por convicción o por necesidad, y se estaba adaptando muy rápido a esta revolución tecnológica que vivimos, consiguiendo importantes mejoras en eficiencia operativa y en comercialización. No obstante, todos coincidían en que el reto no estaba tanto en la tecnología, que todo el sector tiene asumido, como en el compromiso y la formación de las personas del sector, así como en el apoyo ciudadano de la sociedad en localidades que, como Alicante, tienen una dependencia importante del turismo.