ALICANTE. Las muñecas tradicionales, las de toda la vida, vuelven a estar de moda en las cartas a los Reyes Magos. Y de esa coyuntura se han aprovechado empresas especializadas en este producto como la juguetera Antonio Juan SL, asentada en la localidad alicantina de Onil. A punto de cumplir 60 años de trayectoria (aunque no siempre bajo la denominación actual, que nació en 1991), la firma colivenca ha disparado su facturación casi un 35% en el último año, según las cuentas depositadas en el Registro Mercantil, y espera un comportamiento similar para el próximo ejercicio, con la campaña de Navidad a la vuelta de la esquina.
Según las cuentas del último ejercicio, Antonio Juan facturó 4.551.140 euros en 2016, un 34,6% más que el año anterior, cuando la cifra de negocio fue de 3.387.324 euros. El incremento de las ventas tuvo un impacto notable en el resultado al final del ejercicio: la fábrica de muñecas se anotó un beneficio neto de 274.372 euros, el triple que un año antes (105.915 euros). Los gastos de personal, asimismo, casi se duplicaron como consecuencia de la mayor carga de trabajo: de 360.000 euros en 2015 pasaron a cerca de 650.000 el año pasado.
El administrador de la compañía, Marco Antonio Juan, atribuye el incremento de facturación a la calidad del producto que ofrecen. Fabricadas íntegramente en Onil y avaladas con el sello de origen y calidad ORIGIN, las muñecas son elaboradas según un modo de fabricación estrictamente artesanal y con un variado catálogo que se renueva anualmente, al menos en su 50%. "Nuestra experiencia, pues somos la tercera generación de tradición familiar en el sector, nos permite ser flexibles y crear productos adaptados al mercado actual. Seguimos manteniendo nuestro empeño por innovar y ofrecer juguetes de calidad a un precio competitivo. Todas estas características son percibidas por el consumidor final y marcan la diferencia frente a nuestra competencia", explica el empresario.
La gráfica de ventas a lo largo de los últimos 10 años muestra como se ha triplicado el volumen de negocio, según los datos ofrecidos por la empresa, "un incremento que nos proporciona una visión de futuro alentadora", asegura. Además, gracias a la estrategia de internacionalización llevada a cabo desde la firma de muñecas, sus productos se venden actualmente en más de 30 países de todo el mundo, que suponen una cuota de ventas del 50% del total de la facturación de la firma.
El escenario general, además, es favorable a empresas como la de Antonio Juan. Según los datos elaborados por la consultora NPD para la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ), con sede en Ibi, dentro de todas las categorías de juguetes la que más está creciendo es precisamente la de las muñecas, con un incremento superior al 20%. Y dentro de la categoría de muñecas, las que más se venden son las muñecas bebés (la especialidad de la fábrica colivenca), que crecen un 51%. Los clásicos de toda la vida, las muñecas que han acompañado a los más pequeños generación tras generación, son las que están impulsando este segmento.
Desde Muñecas Antonio Juan destacan que "a pesar de estar en la era de los juguetes tecnológicos la muñeca clásica, de siempre, vive una época de bonanza". La Comunitat cuenta con una arraigada tradición juguetera que se concentra sobre todo en el denominado 'Valle del Juguete' (Ibi, Onil y Castalla, pese a que Famosa movió su fábrica a Alicante). Esta zona aporta gran parte de la producción juguetera de España, que cuenta con una cuota del 16% del total del mercado de juguetes, lo que convierte al nuestro en el el país europeo donde más muñecas se venden.