ALICANTE. El Hércules de Claudio Barragán levanta el telón de la competición el domingo (12 horas) con un partido en Formentera.
Este viernes el equipo trabaja en el José Rico Pérez, pero ayer lo hizo en las instalaciones de Montemar sobre una superficie de césped artificial como la que se encontrará en el Municipal de la localidad balear donde, eso sí, como mínimo han puntuado todos los equipos que lo han visitado en lo que llevamos de curso: ganó (0-2) el Baleares en la segunda jornada; hizo lo propio (1-2) el Ontinyent en la cuarta; en la sexta empató (0-0) el Alcoyano; y en la octava lo hizo (0-0) el Ebro.
El juego aéreo y las acciones a balón parado, la "falta de atención" a la hora de defender esas jugadas, preocupa y mucho a Claudio que ya en su rueda de prensa de presentación decía haber detectado, en los partidos que había presenciado del Hércules, que el problema del buen número de goles que los blanquiazules habían encajado en acciones de este tipo respondía a "una falta de concentración (...) por los minutos en los que han sucedido".
Por esa razón, el jueves el equipo trabajó este tipo de jugadas, algo que a buen seguro hará también este viernes, ya en el Rico Pérez, pero no solo desde el punto de vista defensivo y es que, como apuntaba el martes el entrenador valenciano: "El balón parado hay que explotarlo (...) los partidos son tan igualados que se deciden por detalles". El Hércules no se caracteriza precisamente por sacar partido a las acciones a pelota parada que en superficie sintética, como la del domingo, resultan todavía más clave.