XÀBIA. El Ayuntamiento de Xàbia ha hecho pública una de las contratas para limitar y controlar el acceso de vehículos y el aforo el calas más visitadas de la población durante los meses de verano y evitar daños así en el litoral y en los alrededores de sus entradas, donde hace años el volumen de vehículos generaba todo tipo de problemas.
El consistorio ha sacado a concurso el servicio de vigilancia y control de accesos. Este contrato rebasa los 103.000 euros y tiene como misión que una empresa se quede la gestión de este servicio y ponga una plantilla de algo más de una decena de personas, como ha explicado el concejal de Turismo, Toni Miragall.
“Esta es una de las medidas que llevamos tomando desde hace años para conservar mejor las calas y que quienes accedan disfruten, evitando daños en el entorno”, ha precisado el edil del PSPV de Xàbia, quien ha recordado que a principios de junio el Ayuntamiento colocará las barreras que impedirán el paso y que sólo podrán ser levantadas y permitir la entrada por los vigilantes que se contraten a través de este concurso.
Habrá barreras y vigilantes en la Cala Granadella, en el Portitxol y en la Cova Tallada. En cada uno de estos puntos habrá varios turnos para garantizar el servicio y la vigilancia durante toda la jornada. El contrato prevé que el servicio esté activo desde mediados de junio hasta finales de septiembre.
“Son calas muy visitadas por gente de toda la Comunitat y es necesario establecer controles por la conservación del entorno, pero también por la propia seguridad de quienes nos visitan y optan por pasar un día en Xàbia”, ha precisado el concejal.
El edil ha recordado que el Ayuntamiento de Xàbia lleva años ofreciendo alternativas para dejar los vehículos y llegar hasta estas calas con medios de transporte público. De hecho ha explicado que existe un tren lanzadera para llegar hasta la Granadella y un bus para acudir al Portitxol.
Esa no es la única contrata relacionada con el control de accesos, ya que para poder vigilar la entrada de vehículos a las zonas permitidas son necesarios otros servicios. Miragall ha detallado, por ejemplo, los servicios de aparcamiento con zona azul en la Granadella y el Portitxol, o la contrata del tren lanzadera a la Granadella.
“Son pasos y gestiones necesarias para poder controlar los accesos a las calas más preciadas y atractivas que tenemos en Xàbia y que despiertan el interés de muchos turistas y vecinos de comarcas cercanas. Hay que conservarlo, garantizando que quienes acudan puedan disfrutar del paraje”, ha finalizado el edil.