ALICANTE. En la agenda política de cada fin de año se repite cíclicamente un tema: los presupuestos para el año que entra. Aquellos ayuntamientos que sí van a tener nuevas cuentas para 2022 las aprobaron, en su mayoría, en diciembre. Sin embargo, no todos los consistorios dieron el paso antes de terminar 2021, viéndose abocados a prorrogar el proyecto presupuestario del año anterior, bien por el momento, bien de manera definitiva. En la comarca de L'Alacantí los hay de ambos bandos, si bien parece que la inmensa mayoría de consistorios sí trabaja en la elaboración de este documento.
Mutxamel es uno de los pocos municipios que ha dado luz verde a unos presupuestos nuevos para este año. Lo ha hecho sin apoyo de la oposición -ya sea en clave de abstención o de negativa-, con los únicos votos a favor del equipo de Gobierno (PP y Ciudadanos). Se trata de unas cuentas que ascienden a 26 millones de euros y que incluyen varias de las propuestas realizadas por los grupos opositores, incluyendo el 80% de las enmiendas del PSOE, el 75% de Compromís, el 60% de Podemos y el 72% de VOX.
Los números que Mutxamel maneja para este nuevo ejercicio aumentan, entre otras, la encomienda de la jardinería, la limpieza de edificios y la ampliación del autobús de tarde para las urbanizaciones. Además, la educación, la informática y la cultura también adquieren mayor presencia, incluyendo en este último apartado una partida para la creación de la Cátedra Arcadi Blasco, proyecto en el que se está trabajando de manera conjunta con la Universidad de Alicante.
Durante el debate plenario, la oposición insistió en la continuidad de los presupuestos, sin "ninguna innovación relevante", expresando que no son "ni realistas ni equilibrados". Además, notificaron algunas "partidas hinchadas" y achacaron al equipo de Gobierno "falta de previsión", culpabilizándole del estancamiento de Mutxamel con respecto a otros municipios cercanos.
También Agost ha dado el visto bueno a unas cuentas de más de 4 millones de euros antes de que finalizara 2021. En cuanto a El Campello, parece que también tendrá nuevos números en 2022, tras haber trabajado en 2021 con los presupuestos de 2020 prorrogados. Pese a que todavía no se han aprobado, la concejala de Hacienda, Lourdes Llopis (PP), informó en el pleno de diciembre de que ya se encontraban en manos de Intervención y anunció la posibilidad de negociar aportaciones con los grupos de la oposición. Unas negociaciones que podrían derivar en un mayor consenso, tras haber experimentado el tripartito sus más y sus menos durante la elaboración del documento.
En el caso de San Vicente del Raspeig, este es el segundo ejercicio consecutivo que las nuevas cuentas no se aprueban antes de la entrada del nuevo año. Un hecho muy señalado por la oposición, que pedía conocer el proyecto antes de decir adiós a 2021. Sin embargo, durante el pleno de diciembre, el concejal de Hacienda, Alberto Beviá (EU), aseguró que el documento se encuentra en la fase final y que se llevará a votación durante la segunda quincena de enero. El motivo principal por el que el edil justificó el retraso fue por la marcha del coordinador de Recursos Humanos al Ayuntamiento de Alicante y la baja por enfermedad de la jefa del Departamento de Recursos Humanos.
En Alicante, 2022 llega como los últimos seis ejercicios precedentes: sin disponer de presupuesto municipal pese al compromiso reiterado por el alcalde, Luis Barcala, de que quedaría aprobado (al menos de forma inicial) antes del 31 de diciembre. Lo cierto es que la propuesta trazada por el equipo de gobierno, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), sigue en fase de fiscalización por parte del departamento de Intervención, después de que se haya celebrado una única ronda de contactos con representantes de los cuatro grupos de la oposición (PSOE, Unides Podem EU, Compromís y Vox) para recabar posibles aportaciones y tantear sus posiciones de voto.
No obstante, las cuatro formaciones opositoras siguen manteniendo un discurso crítico frente a la propuesta, en la medida en que, según alegan, no se les ha dado a conocer el contenido concreto de la propuesta de planificación económica y tampoco se les ha respondido sobre cuáles de sus sugerencias podrían quedar incorporadas al documento. Así, el hipotético respaldo de alguna de las cuatro fuerzas sigue en el aire, de modo que PP y Cs no tienen garantizada todavía la mayoría simple que necesitan para que su propuesta acabe aprobándose en pleno (suman 14 concejales en una corporación de 29).
Entre tanto, en las filas del bipartito se sostiene que el retraso en la aprobación de las cuentas se habría producido como consecuencia de la reconfiguración que tuvo que adoptarse tras la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que anuló el método de cálculo para la recaudación del impuesto de las plusvalías. Esa sentencia habría propiciado una merma de cinco millones en ingresos. Por lo demás, se argumenta que la propuesta presupuestaria tiene un carácter continuista en la medida en que incorpora las inversiones plurianuales que se incluyeron en las cuentas de 2021. Y, por último, aseguran que ya se han incorporado parte de las sugerencias formuladas por los grupos opositores con la previsión de poder incorporar otras a través de la presentación de enmiendas, en cuanto el proyecto quede aprobado en Junta de Gobierno.
Por su parte, la Mancomunidad de L'Alacantí sí se anticipó al fin de año y aprobó unas cuentas de 1,06 millones de euros, lo que supone 18.784 euros menos que en 2021 (1,08 millones). Unas cifras que se han mantenido, más o menos, en niveles similares. Unos presupuestos que, además, han sido prematuros en comparación con el año anterior, pues el órgano comarcal dio el ok en noviembre para que puedan entrar en vigor a principios de 2022, mientras que las de 2021 se aprobaron ya con el 2021 en curso, el 26 de marzo.
Aunque la voluntad de Santiago Román (Cs), alcalde de Sant Joan d'Alacant y edil de Hacienda, era la de entrar a 2022 con unas nuevas cuentas, no ha sido así. El consistorio sigue inmerso en la redacción del documento, aunque el primer edil ha avanzado a Alicante Plaza que la intención es que esté listo a lo largo de enero, "lo cual no significa aprobarlo ese mes", ha matizado. Román ha asegurado que, una vez estén listas todas las propuestas del equipo de Gobierno -pues faltan algunas concejalías-, se llevarán a cabo las negociaciones con la oposición.
Los precedentes de 2021 no fueron los óptimos: pese a las múltiples insistencias -desde noviembre de 2020- de aprobar un proyecto presupuestario para 2021, lo cierto es que el Ayuntamiento de Sant Joan se vio abocado a trabajar con las cuentas prorrogadas. Fechas sobre la posible aprobación no faltaron -planteando incluso que Albero no cedería la Alcaldía a Román hasta que se hubiera dado el visto bueno-, pero la realidad fue otra: tras casi un año anunciando voluntades, en noviembre de 2021, con Román ya al mando, se anunció que finalmente no se aprobarían debido al desequilibrio financiero que causó la anulación del impuesto de las plusvalías.
Por último, Xixona se corona como el municipio más atrasado en la elaboración de las nuevas cuentas. Según ha explicado a este diario el concejal de Hacienda, Ricardo Mira (PSOE), todavía no se han empezado a elaborar los presupuestos. Los motivos los justifica por el ataque informático que sufrió el consistorio en 2021, por lo que la prioridad ha sido "volver a la normalidad en el pago a proveedores". Además, el edil ha recordado que las cuentas anteriores a las aprobadas en 2021 fueron las de 2018, estando tres años en funcionamiento, lo que deja entreabierta la posibilidad de prorrogar los números actuales. En este sentido, el responsable de Hacienda ha adelantado que, una vez al día en el pago a proveedores y en la contabilidad, se decidirá si 2022 mantendrá los presupuestos de 2021.