Foto: VITHASVALÈNCIA. Turrones, mazapanes, polvorones, chocolates, roscones y panettones no faltan desde hace semanas en los hogares españoles, que este año han aumentado las compras entre un 4 y un 7 %, según varios operadores del sector que coinciden en que los sabores clásicos siguen reinando en un negocio que no deja de innovar.
"Aún es pronto para podehan aumentado las compras entre un 4 y un 7 %, según varios operadores del sectorr hacer una valoración real de la campaña, y más, si se tiene en cuenta que es a partir de los días cercanos al 24 de diciembre cuando los hogares hacen la compra más destacada", ha asegurado a Efe el secretario general de la patronal Produlce, Rubén Moreno.
A pesar de su prudencia, ha reconocido que la industria del dulce navideño es a día de hoy "optimista" y mantiene las previsiones que hizo a primeros de diciembre de un incremento de la facturación del 4 % respecto a la campaña de 2020.
Según esta patronal, las industrias del dulce facturaron el pasado ejercicio 290,8 millones de euros en productos navideños, una cifra un 4,4 % inferior a la registrada justo antes de la pandemia de la covid, sobre todo por el descenso de la exportación; de esa facturación, el 85 % se generó con la venta de turrones y mazapanes.
Las novedades pasan por productos dulces pero sin azúcar, turrones de autor como los de Albert Adriá y José Andrés, un plátano meloso crujiente de galleta bañado en chocolate negro ideado por Eva Arguiñano, sabores como el turrón de cerezas con praliné de nueces pecanas y más formatos de bandejas multiproducto y de aperitivo.
El gremio artesano, el de las pastelerías de barrio tradicionales, también se muestra contento de cómo está transcurriendo la principal campaña del año, que comenzó a mediados de noviembre, ha apuntado el presidente de la Confederación Española de Empresarios Artesanos de Pastelería (Ceeap), Miguel Moreno.
"Las ventas van muy bien, mejor que el año pasado e incluso que en 2019", ha afirmado Moreno, quien ha señalado que en los últimos años perciben varias tendencias: los roscones ya no solo se consumen en reyes, hay una migración de los productos de azúcar y almendra a los de harina y de chocolate y una vuelta a los "sabores antiguos".
"Este año se vuelve a reservar los troncos de navidad clásicos, con crema, praliné o yema tostada para cenas como la de Nochebuena, dejando en un segundo o tercer plano las combinaciones exóticas", ha puesto como ejemplo.
La encargada de la legendaria tienda de turrón artesano Casa Mira, Rebeca Pastor, también ha estimado que las ventas, que se han impulsado mucho por internet con motivo de la pandemia, van a superar a las del pasado año y previsiblemente se van a igualar a las de 2019.
El secretario general de las indicaciones geográficas protegidas (IGP) Jijona y Turrón de Alicante, Federico Moncunill, ha hablado de "una recuperación de la exportación" y de una campaña en el mercado nacional que va "francamente bien, con un crecimiento que se situará entre el 5 % y el 7 %" respecto a la anterior.
Moncunill ha recordado que en la Comunidad Valenciana se produce el 60 % de los dulces navideños que se elaboran en España -Alicante es además líder europeo en productos con chocolate-, y sólo de turrón, esta región vende cada año 20 millones de barras con sello IGP y otros 50 millones sin dicha distinción.
