El juego de las sillas

ALICANTE. Samuel Llorca no mejora lo suficientemente rápido del edema óseo cervical que sufre, sigue necesitando guardar reposo, por lo que está descartado para el partido de este domingo frente al Castellón, encuentro que también se perderá Fran Miranda al que la Jueza de Competición sancionaba este miércoles con un encuentro de suspensión por acumulación de amarillas. 

Esas son las dos bajas con las que ahora mismo habría de lidiar el técnico del Hércules, Lluís Planagumà, que recupera a Pablo Íñiguez y Stéphane Emaná que como Samuel se perdieron el partido de Olot.

La vuelta de Íñiguez, plenamente recuperado del cólico que le llevó hasta el hospital hace dos semanas, otorga al entrenador barcelonés una opción más a la hora de elegir qué dos jugadores forman la pareja de centrales: aunque lo lógico es que continúen Álvaro Pérez y Pol Bueso en el eje de la defensa, Planagumà podría también alinear al primero junto a Íñiguez. 

Por lo que se refiere al regreso de Emaná, que se ha perdido por problemas musculares siete de los once partidos de Liga y de los cuatro en que ha participado solo en uno fue titular, su disponibilidad no parece que vaya a afectar precisamente al once inicial, ya que Juli y sobre todo Chechu están rindiendo a buen nivel (salvo en lo que al acierto de cara a gol se refiere) como acompañantes de Carlos Martínez en el ataque, pero la vuelta del delantero camerunés sí podría dejar fuera de la convocatoria a un Carlos Fernández que no ha logrado hacerse un hueco en el equipo pese a las múltiples ausencias de Emaná.

Fran Miranda

Y en cuanto a Fran Miranda, parece claro que su hueco en el once (lo ha jugado todo desde la segunda jornada) será ocupado por Paco Candela, volviendo Planagumà al doble pivote que eligió para la primera jornada de Liga. 

No obstante, el técnico también cuenta con un cuarto pivote, el colombiano Jaime Alvarado, aunque ha participado muy poco, como Candela que, eso sí, se vio fuera del equipo por culpa de una lesión muscular.