ALICANTE (EFE). El central Diego Jiménez aseguró este martes, en su presentación oficial con el Hércules, que desea quitarse en Alicante una espina y volver a disfrutar con el fútbol, en alusión al descenso sufrido el pasado campeonato con el Recreativo de Huelva.
El jugador zamorano, de 29 años, se mostró feliz por estar en un club "grande" que peleará por "los máximos objetivos" y asumió que en el Hércules la exigencia será "máxima".
"Es un club con historia y con una masa social importante. Y eso es uno de los principales motivos por los que vine aquí", añadió el futbolista, quien dijo que, pese a que su posición natural es la de central, se siente cómodo en los laterales.
Diego Jiménez se definió como una persona "trabajadora e intensa dentro del campo" y reconoció que jugar en el Hércules supone "un reto muy grande".
En cuanto a la plantilla que se está formado, el zamorano confió en formar "un buen equipo que será competitivo" y aseguró que no le pesará la presión de jugar en el Hércules.
"He vivido desde ser campeón hasta un descenso. Sé cómo es la afición y hay que respetarla y darlo todo en el campo para que se sienta orgullosa de cómo defendemos el escudo", apostilló.
Jiménez aseguró que la próxima temporada será muy dura ante el poder económico de clubes como Murcia, Águilas, Eldense o Intercity, si bien precisó que el Hércules tiene a su favor que es un club "grande al que la gente quiere venir".
"Las aspiraciones deben ser las máximas, pero debemos ir poco a poco y seguro que será un gran año", concluyó el ex capitán del Recreativo.