EL CAMPELLO. La comisión encargada de supervisar las obras del vertedero de 'Les Canyades', en El Campello, todavía no se ha convocado. Cuando se aprobó la creación de esta Comisión de Seguimiento, se acordó que se reuniría dos veces al año con carácter ordinario, sin perjuicio de las reuniones extraordinarias que pueda convocar la Presidencia a iniciativa suya o a solicitud del Pleno del Ayuntamiento campellero. Fue en marzo de 2021 cuando se nombró a los y las vocales que conformarían dicho órgano, acordando que serían cuatro representantes del consistorio (dos del equipo de gobierno y dos de la oposición) los que lo integrarían.
La Comisión de Seguimiento se vuelve importante para conocer acerca de las obras que empezaron en 2020 y se prolongan hasta la actualidad. Unos trabajos que, según anunció el Consorcio Mare cuando empezaron, "pretenden mejorar los índices de recuperación de los residuos y, además, evitar los malos olores para atender así la principal reivindicación vecinal". El presidente de la entidad, José Vicente Ferriz, declaró en su momento que con esta actuación se "optimiza el funcionamiento de la planta, cumple con la normativa que marca Europa y la propia Generalitat Valenciana en materia de gestión de residuo, permite tratar la materia orgánica adecuadamente y subir de forma exponencial la recuperación de productos".
Por ello, el portavoz de Esquerra Unida (EUPV), Pedro Mario Pardo, ha solicitado que se convoque el órgano tras dos años desde su aprobación, "sin que hasta la fecha se haya convocado, ni tan siquiera, una sola reunión", ha recalcado. "Una comisión que se tendría que haberse reunido de forma ordinaria dos veces al año y cuyo objeto, en el papel, era el de aportar al Ayuntamiento de El Campello toda la información técnica de las diferentes actuaciones que se iban a acometer en la planta, así como toda información relevante sobre el avance de las obras, las interacciones con el servicio que se presta y la previsión de la puesta en funcionamiento de las diferentes actuaciones".
En contraste, Pardo ha considerado que se trata de una comisión que "para lo único que sirvió, hasta la fecha, fue para llenar unos cuantos titulares de prensa. A pesar de ello, de que las obras estén prácticamente finalizadas y que a EU la dejaron fueran de dicha comisión, consideramos necesaria la convocatoria de esta comisión cuanto antes para que expliquen al municipio qué han hecho con los 20 millones invertidos, sin concurso público, en la planta de residuos, y que los problemas sigan igual o peor que cuando empezaron".
En junio de 2020, la planta de residuos Les Canyades sufrió un incendio en el interior de las instalaciones originado por un camión de descarga. Es por ello que un agente ambiental elaboró un informe, dio traslado de la situación a la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica e interpuso una denuncia sobre FCC Medio Ambiente, adjudicataria de la explotación del vertedero, por "incumplimiento de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) al no tomar todas las medidas necesarias para que quede garantizada la protección del medio ambiente de las personas de cualquier situación fuera de la normalidad por lo que respecta al funcionamiento de las instalaciones", según apunta el documento al que tuvo acceso este medio.
Por ello, Pardo ha informado de que el grupo municipal ha solicitado al Consorcio "la documentación que acredite las medidas que, esperemos, se hayan adoptado desde entonces", como ya anunció la agrupación de izquierdas en agosto, al tener constancia del informe del agente ambiental. "A pesar de la gravedad de los hechos descritos, en los que se pusieron en riesgo al propio personal de la planta, los vecinos y vecinas de la zona e incluso al propio paraje en el que su ubica la planta, esta formación política no ha obtenido ninguna respuesta", ha señalado.
Además, el concejal de EUPV en El Campello ha querido recordar a la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mirella Mollà, que "tiene encima de su mesa un protocolo de vigilancia y control que debería estar en funcionamiento desde el año 2016 y que, por ello, se debe poner en marcha cuanto antes. No se puede tener a las personas tan desprotegidas y vulnerables cada vez que ocurre un episodio de olores y químicos. Es su responsabilidad actuar", ha instado.