Claves y variables de las elecciones en Elche: barrios en disputa y bolsas de votos 'libres'

ELCHE. Este jueves tenía lugar en el histórico 1 de Mayo la presentación de candidatura del PSOE. El sábado el Partido Popular estuvo en la plaza Francesc Cantó en su primer mitin de campaña, y este martes lo hará Vox también en el 1 de Mayo. Queda claro que Carrús es y será uno de los territorios en disputa para estas dos elecciones. Pero solo uno de los puntos y termómetros que serán claves de cara al próximo 28M.

La batalla por Carrús

Precisamente en el último pleno municipal los dos partidos de la oposición le recordaban al PSOE que en el barrio trabajador ya no es hegemónico. Mientras que Vox ha estado intentando acercarse estos años con carpas por distintos barrios, también allí, el PP ha ofrecido varios proyectos de renovación urbana, con su propuesta de diseño, ya que el tema visual siempre tira, prometiendo millonarias actuaciones en la Avenida de la Libertad, Plaza Madrid o Jayton.

Por ahora, los socialistas mostraron que siguen fuertes allí, con una presentación con en torno a las 600 personas (casi 500 sillas según el PSOE, y gente de pie en los laterales). Sin embargo es un caladero de votos como ninguno otro, con 80.000 habitantes. La última y única vez que el PP logró rebañar la alcaldía ilicitana fue obteniendo allí unos buenos resultados para el partido, aunque no solo (también obtuvieron bastantes papeletas en zonas como San Antón o Palmerales). Eso sí, también en un contexto de grave crisis en la que el PP en general, arrasó. 

El barrio, como se ha venido contando, necesita importantes renovaciones y actuaciones a distintos niveles en zonas verdes, espacios públicos y viviendas o accesibilidad. Aunque el equipo de gobierno se ha anotado un tanto importante con la captación de casi 10 millones de euros para la reforma integral de Porfirio Pascual, otras actuaciones de envergadura, también con fondos europeos pero con otro programa, los Edusi, se han ido atrasando. Es el caso de la renovación de Carrús Este y su nueva pasarela, que ahora ya no será volante, o no tanto, o el Palacio de Deportes junto al Cementerio Viejo, en Carrús Oeste. Y la iniciativa de Jayton sigue sin conocerse más allá de su idea de palacio cultural. Un espacio que el PP intenta rellenar con llamativos diseños. 

La vida más allá de los grandes proyectos

En cualquier caso, fuera de los grandes proyectos, en general en los barrios, los debates suelen ir por otros derroteros, con la preocupación por el empleo o cuestiones más cotidianas como la limpieza, las dotaciones y cuestiones que hagan la vida en la ciudad más confortable. De ahí que por ejemplo el candidato del PSOE, Carlos González, acostumbrado a las distancias cortas, incida tanto en los equipamientos al ver cómo respiran los vecinos. En el PP, que llevan varios años en campaña permanente, sobre todo en los últimos con reuniones y panfleteo entre los vecinos, también se han dado cuenta de la importancia de pulsar esas otras opiniones de los problemas del día a día, alejados de iniciativas grandilocuentes que siempre son más llamativas.

Movilidad y aparcamientos

Precisamente, una de esas cuestiones que ya está marcando parte de la campaña es la de la movilidad, más concretamente, la de los aparcamientos. La determinación de Compromís —que ha cumplido varios de sus principales ejes en el mandato— con los nuevos carriles bici ha levantado bastantes asperezas, así como otras actuaciones que han supuesto eliminación de aparcamientos, generalmente por peatonalizaciones. Una de indiscutible éxito como la Corredora y la Plaça de Baix y otras que vinieron acompañadas de críticas por la iniciativa en Olegario Domarco Seller, con más de un centenar de aparcamientos eliminados sin una alternativa cercana. 

Actuaciones como esta última habrá que calibrar como sientan en PSOE y Compromís. Los primeros siempre han mirado de reojo algunas de las actuaciones de sus socios de reojo en materia de movilidad, sabiendo que el parque móvil motorizado aumenta cada vez más. Y por ello han acelerado con el millar de aparcamientos, que acabando el alcalde prometió otro millar. Mientras que el PP presentó su plan también, con aparcamientos en barrios y en el centro, combinando los subterráneos con otros como el de Jayton, el PSOE ha contraatacado ahora señalando que realizarán más de 3.000. También con subterráneos, rotatorios o gratuitos. Un quién da más de manual y que muestra que ya es un vector importante de la campaña.

El tirón de los aliados

Precisamente sobre Compromís, o Vox, su papel será fundamental para repetir bipartito o que la derecha vuelva a gobernar el Ayuntamiento. Una vez más, aunque ha habido intentos de otras fuerzas, como Podem o Esquerra Unida de confluir con Compromís, finalmente no se logró acuerdo. Precisamente porque en las alianzas el grande suele crecer más, o por la polémica con el PMUS de Compromís, es una incógnita cómo les puede afectar, si bien han mostrado que tienen una base de votos que les permitirá como mínimo que repita la alcaldable, Esther Díez. Eso sí, irá acompañada de Marian Campello, por la rama de Més, quien le disputó el puesto en las primarias y que obtuvo un buen resultado a pesar de su derrota.

De que no se desplome podría depender un tercer mandato de González, salvo que el PSOE logre un aumento de votos —Soler llamaba a la movilización en el acto para mantener esas 40.000 papeletas de 2019— que le acerque a la mayoría absoluta que busca. Y por el otro lado, Vox es una de las incógnitas, siempre han vivido sobre todo de la marca nacional, sin apenas comparecencias públicas —hay diferencias con la dirección provincial—, tan solo con las intervenciones en los plenos o en bloque con la oposición, aunque había trabajos de fiscalización precisos del fallecido Juan Antonio Alberdi. El partido ha optado por no hacer experimentos raros y repetir con Aurora Rodil, que no ha destacado especialmente por su carisma, y encargada de la parte más política e ideológica en el tándem con Alberdi. Aunque de la misma forma que la marca nacional ha perdido fuelle, a nivel local tampoco fhan sufrido ningún tipo de desgaste. Por los repartos de votos seguramente podrían mantener los dos ediles, y habría que ver si crecen, y si ese crecimiento es a costa del PP o no. En 2019, Vox entró con dos ediles, el PP mantuvo los 9, y Ciudadanos pasó de 4 a 2 concejales. El trasvase de votos parece evidente.

Las bolsas de votos que hay desde 2019

Esas bolsas de votos en juego serán importantes. Desde Ciudadanos, Mamen Peris cuando acudió a respaldar a García-Ontiveros como candidato auguró que había varios miles de indecisos o potenciales en el 'centro'. Todo el mundo ha hecho sus cuentas mirando las cifras de 2019. El PP obtuvo más de 28.000 votos, por los 37.000 del PSOE. Sin embargo, confían en la descomposición de Ciudadanos, que solo logró dos concejales, pero con casi 9.000 votos; lo que podría supone al menos dos concejales más. Pero también hay que recordar que están los 3.000 que obtuvo Ilicitanos por Elche, viendo si como escisión que fueron, volverán a la 'casa común', o los casi 3.000 del Partido de Elche. ¿Dónde irán ahora? Hay también más actores activos, como Contigo, que buscan también un perfil de centro, ahora llamándolo municipalista, que podría rascar votos de un perfil objetivo del PP o Cs.

El papel de Ciudadanos y la dispersión (menor) en la izquierda

Y en Cs tienen el reto de retener su cifra, aunque la entrada del alcaldable ya sería un éxito teniendo en cuenta la coyuntura estatal y local, ya que con Eva Crisol no se contaba con que hubiera lista y esto puede suponer un pequeño contratiempo para el PP (o no). Aunque por ejemplo en las últimas elecciones nacionales, parte del voto de Ciudadanos en barrios como Altabix nuevo fue compartido con Vox. Así pues, muchos mirando ahora el caladero que puede quedar de Cs, con los que cuentan para crecer si Ontiveros no logra mantener su centro para evitar fugas a otras opciones. Y dentro de ese baile de cifras, la dispersión en la izquierda seguirá siendo una tónica, aunque menos que en 2019, donde a la izquierda del PSOE concurrieron Compromís, Podemos y Elx en Peu. Ahora Compromís y Unidas por Elche (principalmente Podemos y EU). Los morados intentarán entrar por primera vez al Ayuntamiento. En las últimas estuvieron a punto con casi 5.000 votos; les faltaron los de Elx en Peu, lo que ejemplifica la penalización de la Ley d'Hont en elecciones municipales con esa fragmentación. Aunque han perdido militancia con respecto a hace cuatro años Podem y EU, estos últimos en constante renovación de dirección, aunque ahora parecen ya estables.

Nuevos votantes y pedanías

Otro factor interesante será el de los más de 9.000 votantes nuevos, jóvenes que podrían utilizar su primer sufragio y que según estudios de los últimos tiempos a nivel nacional están más escorados a izquierda y derecha. Y como siempre, las pedanías puede ser un territorio en disputa, en el que suele ganar también el PP, aunque ya ha habido penetración de Vox en últimas citas, pero también el PSOE mejoró en algunas pedanías en 2019. Eso sí, se prevé, que formaciones como El Altet Decide vuelvan a arrasar en su área. Ahora el grueso de partidos ya ha aprendido a base de las quejas y de los errores cometidos por Ejecutivos anteriores. Han hecho los deberes y han estado dos viernes de debates sobre sus exigencias (aunque en la primera edición no hubo nadie del PSOE).

Los aliados grandes, Puig y Mazón; Generalitat y Diputación

Por último, también los dos grandes partidos han visto como sus candidatos han empezado a pisar más suelo ilicitano. Puig por ejemplo lo ha hecho varias veces en las últimas semanas, y Mazón igual, que lo lleva haciendo en el tiempo para rellenar ese espacio de cubrir la 'deuda histórica' ante la falta de reflejos del president y candidato del PSPV, por la tardanza en impulsar proyectos en Elche. No obstante, ambos partidos juegan con futuribles iniciativas en Elche si ganan, pero que estarían vinculadas a si gana su partido a nivel autonómico (PP y Clarisas o Jayton, o PSOE y Palau de les Arts Escèniques). Y a nivel de compromisos, la Generalitat tiene aún una larga lista de pendientes, como algunos de los principales anuncios de la Diputación aún siguen sin tomar forma. 

Problemas mediáticos pero sectoriales y contexto general

En el plano de los colectivos, hay mucho enfado del entorno que se ha manifestado por el patrimonio o el palmeral por la actitud del bipartito con todo lo relacionado al Mercado Central, los retrasos y falta de financiación con el palmeral o un proyecto del Convento de la Merced por el hotel en el que el PP mostró su rechazo desde el principio. Pero son ámbitos sectoriales que aunque quizá magnificados o con mucha presencia mediática, pueden no pesar tanto en comparación con la coyuntura económica: si hay más empleo y la crisis sigue atrás, si la inflación sigue golpeando, si se han facilitado ayudas, o si por ejemplo sigue existiendo un voto de cabreo y antipolítica tras el impacto de la pandemia. 

La gran crisis de 2008 fue la que apeó al PSOE por primera vez en democracia del Ayuntamiento. ¿Existe ahora esa sensación? Son algunos factores, como las políticas del Gobierno, que pueden impactar, aunque la dinámica local siempre tiene sus particularidades (retrasos de obras, administración, proyectos sin fructificar, esas pequeñas mejoras mundanas, reparto de ayudas o bonificaciones...). Como siempre, muchas aristas en unas elecciones que da la sensación que en este 2023 estarán más disputadas por el empuje de ambos bloques.