El Camping La Torreta de Benidorm ampliará sus instalaciones con el doble de extensión actual 

BENIDORM. El Camping la Torreta de Benidorm ampliará su capacidad alojativa. El Ayuntamiento ha informado de manera favorable la licencia de obra mayor para incrementar sus plazas a lo largo de tres parcelas anexas a su establecimiento, que se expande en una superficie que unida a la actual duplicará su extensión, según ha podido conocer este diario. El alojamiento es propiedad entre otros del ex edil del PP, Salvador Moll, empresario turístico ya retirado de la política. En los últimos años la actividad fue objeto de controversia después de que se le revocara la licencia en 2017 por estar en zona inundable. Sin embargo, el expediente elaborado para el permiso solicitado señala que en la actualidad no consta ninguna incoación de restauración de la legalidad urbanística.

Su ubicación en el Rincón de Loix se sitúa entre el colegio Lope de Vega, las instalaciones del Benidorm Circus y el Benidorm Palace. En la actualidad, es uno de los campings más pequeños de Benidorm. Alberga 237 parcelas y 11 bungalows. Aunque no detallaron el aumento de plazas concreto, fuentes municipales señalaron que el proyecto servirá para añadir nuevas unidades de alojamiento y módulos de aseos.

Su capacidad de ampliación es grande. Para ello, explotarán tres parcelas situadas entre la Urbanización Rocas Blancas y el Camping el Racó, a unos 150 metros del establecimiento actual desde la avenida Dr Severo Ochoa. La extensión de las parcelas son de 58.696 metros cuadrados, 25.499 metros cuadrados y 46.738 metros cuadrados, según datos del catastro. No actuarán sobre una edificación existente y se vigilará el correcto flujo de tráfico en las vías afectadas del entorno por el incremento de la actividad, sin descartar que se tenga que ejecutar una rotonda en caso de problemas.

Según explicó la concejal de Urbanismo, Lourdes Caselles, aquellos problemas surgidos por estar en una zona considerada inundable están zanjados. Tras las lluvias torrenciales de diciembre de 2016, la Policía Local constató en su informe, que en la zona que invade el cauce "se encuentran estacionadas un elevado número de caravanas, con peligro para éstas". El 29 de marzo de este año, el departamento de Ingeniería municipal emitió otro informe en el que constaba que el camping, "en su práctica totalidad", está afectado "por peligrosidad de inundación de origen geomorfológico".

Meses más tarde, el Ayuntamiento anunció el proyecto de encauzamiento del Barranco Barceló, que recogía en su documentación que era una solución a los posibles inundaciones en la zona. La nueva ubicación está más alejada de la zona en cuestión considerada en riesgo, aunque también está próxima a parte del cauce.