PETRER. Este martes, la concejala de Fiestas de Petrer, Ana Tortosa, y el presidente de la Unión de Festejos, Enrique Rubio, han hecho público que ambas entidades han acordado destinar la cantidad del convenio anual que el Ayuntamiento aporta a la entidad festera a la renovación y reforma integral del castillo de Embajadas, una mejora estructural que no se lleva a cabo desde su construcción en el año 1950.
“Después de que, por segundo año consecutivo, no hayamos podido celebrar nuestras fiestas debido a la pandemia, acordamos con la Unión de Festejos destinar los 41.000 euros del convenio anual del Ayuntamiento a la reforma integral del castillo de Embajadas, una renovación muy necesaria para adaptarlo a la normativa vigente”, ha expresado la concejala de Fiestas.
Tortosa ha querido recordar y poner en valor que “el año pasado, cuando no se pudieron celebrar las fiestas, la Unión de Festejos tuvo un bonito gesto con la ciudad, pues renunció a la aportación del convenio actual en favor de otras necesidades de educación, servicios sociales y, en definitiva, ayudas necesarias motivadas por las crisis sanitaria”.
Por su parte, Enrique Rubio, presidente de la Unión de Festejos, ha agradecido el gesto del Ayuntamiento “por cambiar el contenido de la subvención para fiestas de Moros y Cristianos a la reforma y adaptación del castillo de Embajadas”, teniendo en cuenta que “es un castillo que lleva en pie desde el año 1950 y solo se ha ido reformando de manera estética”.
Según ha explicado el presidente, la reforma de la fortaleza va a consistir en la dotación de una estructura de cimentación o base metálica para un montaje totalmente autónomo, independientemente del lugar, y la sustitución de las tarimas de las dos plantas superiores, que hasta ahora nunca se habían cambiado. También se contempla la instalación de iluminación exterior e interior, en la que se incluyan luces de emergencia en pasos y escaleras interiores, y la aplicación de una capa de pintura en interior y exterior para mejorar la protección de la madera.
Además, se van a llevar a cabo varias adaptaciones para que el castillo cumpla con todas las normativas actuales, como la sustitución de las escaleras altas de madera del interior por escaleras metálicas con protecciones; y el aumento de la altura de las barandillas de los balcones para mayor seguridad.
Rubio ha subrayado que, “en definitiva, lo que se va a hacer es reformar todo el castillo para que dure otros 70 años más”, y ha precisado que, estéticamente, “va a estar igual que ahora porque, al ser del año 50, es como una joya”. Tanto la concejala como el presidente de la Unión de Festejos han aprovechado para seguir lanzando un mensaje de ánimo a la familia festera, con la esperanza puesta en la celebración de las fiestas de 2022.