Los ediles del PSOE que forman parte de la comisión, Eduardo Rodríguez y Trini Amorós.ALICANTE. El grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Alicante se ha felicitado este martes sobre la constitución de la comisión de comercio propuesta por los socialistas en el pleno ordinario de octubre y que quedó aprobada "a pesar del rechazo del PP". Al respecto, la portavoz adjunta del grupo municipal socialista, Trini Amorós, ha defendido que "el objetivo principal de esta comisión es que el Ayuntamiento compense a los comercios las pérdidas sufridas por la mala planificación de las obras y, en cualquier caso, que sean las asociaciones sectoriales las que participen para cuantificar las pérdidas. En ese grupo de trabajo, ha enfatizado la concejala, se debe elaborar un plan que recoja acciones concretas para paliar la situación y debe contar con un presupuesto específico para implementar las medidas que se acuerden", ha incidido, a través de un comunicado.
"Lo importante es que se escuche a los afectados y que puedan participar en la búsqueda de soluciones, es decir, dar a los comerciantes la voz que Barcala les ha negado. Las medidas que ha puesto en marcha el gobierno del PP, como el bono comercio, han sido claramente insuficientes", ha remarcado la edil.
En esta línea, la hoja de ruta propuesta por el PSOE para desarrollar el plan de trabajo incluye, en primer lugar, "realizar un mapeo de las zonas afectadas por las obras y, a partir de ahí, integrar a las asociaciones de comercio que representan a los perjudicados, invitando además a un miembro de la Cámara de Comercio". "Serán estos colectivos los que trasladarán la visión y la realidad de los efectos negativos de las obras mal planificadas por parte del Ayuntamiento y de las consecuencias que se siguen registrando en zonas como la Avenida Jijona, cuyo comercio atraviesa una situación de emergencia por la paralización de los trabajos de remodelación del vial. Todo mientras el gobierno municipal mira hacia otro lado", incide el comunicado.
Al margen de ello, "una vez que se haga una radiografía de la situación, con un análisis de los efectos económicos por las obras, llegará el momento de realizar las aportaciones desde los colectivos sectoriales y de los grupos municipales para implementar medidas específicas. Ese plan deberá después ser ratificado en el Pleno".
Otra de las medidas planteadas por el PSOE consiste en la elaboración de "un protocolo municipal para que, ante cualquier obra de envergadura, el Ayuntamiento coordine la actuación con los sectores afectados. La pretensión es que no se vuelva a repetir la catastrófica situación que se registró durante la campaña estival", añade la nota pública. Amorós ha recordado que los datos del reciente "Plan de acción, impulso y modernización de la ciudad y de los mercados municipales 2023", impulsado por el equipo de gobierno y que todavía no ha sido facilitado a la oposición, revela que "la ciudad ha perdido el 20% de su tejido comercial en la última década y que la situación es especialmente preocupante en los barrios".
Así, ha reclamado que se convoque de forma inmediata el Consejo Local de Comercio para abordar esa cuestión. "Es imprescindible articular políticas públicas decididas y eficaces para potenciar un sector que supone un nicho de empleo fundamental en Alicante, que es imprescindible para cohesionar los barrios y que tiene un impacto muy positivo en la economía de la ciudad".
Por su parte, el portavoz municipal de Esquerra Unida Podem, Manolo Copé, ha considerado que "lo más prioritario en estos momentos es aclarar y acotar cuáles son las zonas afectadas por las obras al menos en el último año". "Y después tener un diagnóstico de la afectación real y objetiva de las obras a los comercios. En ese momento es cuando podremos establecer qué acciones son las más urgentes para proponer al pleno del Ayuntamiento y para paliar la disminución de ingresos evidente que han tenido tantos comercios y tantas familias afectadas", ha considerado.
Además, ha señalado que resulta "necesario contar también con las asociaciones de comerciantes para que puedan trasladar y valorar sus opiniones de cara a las acciones a emprender". "Proteger y potenciar el pequeño comercio pasa en gran medida por que las políticas públicas municipales puedan tomar medidas para garantizar la supervivencia local. Se han perdido un 20% de comercios en los últimos diez años en la ciudad", ha incidido.
