MADRID (EP). Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en España se situaron en 813.396 unidades durante 2022, lo que representa un descenso del 5,4% en comparación con las cifras de 2021 y supone quedarse por debajo de las previsiones de 830.000 unidades al cierre del ejercicio.
Según datos de las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam), este retroceso en comparación con las estimaciones de 830.000 unidades se explica por la caída de las ventas experimentada en diciembre, a causa de los problemas de transporte de vehículos a los concesionarios, lo que ha ocasionado que "miles de vehículos" queden parados en puertos y campas, retrasando su entrega a los clientes.
En diciembre, las ventas de coches en España alcanzaron un volumen de 73.927 unidades, lo que se traduce en un significativo retroceso del 14,1% en la comparativa con el último mes del ejercicio pasado.
Por canales de venta, las entregas a clientes particulares cerraron 2022 con una caída del 1,7%, hasta 366.364 unidades, mientras que en diciembre se contrajeron un 14,7%, hasta 35.677 unidades. Las empresas adquirieron 348.144 unidades en 2022, un 4,1% más, siendo el único canal que creció en el cómputo anual, aunque se dejó un 20,5% mensual, con 31.969 unidades.
De su lado, las empresas de alquiler de automóviles finalizaron el ejercicio pasado con 98.888 turismos y todoterrenos adquiridos, lo que se traduce en una disminución del 35,1%. En diciembre, registraron una subida del 54,6%, hasta 6.281 unidades.
Desde Anfac, Faconauto y Ganvam apuntaron que los volúmenes de cierre de 2022 se vieron afectados por las dificultades en el transporte de vehículos a los concesionarios, lo que ha provocado que miles de automóviles permanezcan detenidos en los puertos y campas.
No obstante, señalaron que 2022 fue un año "complicado" para el mercado español, con motivo de factores como la guerra en Ucrania, el aumento de los costes energéticos y de carburantes o el incremento de la inflación y los tipos de interés que han condicionado la decisión de compra de los usuarios.
El director de Comunicación y Marketing de Anfac, Félix García, explicó que estos factores dejan un "escenario desfavorable" para 2023, cuando se debería "abordar el asalto a la frontera de las 900.000 unidades".
"Todo dependerá de si termina el conflicto en Ucrania y se normaliza la cadena logística para que se puedan entregar más vehículos nuevos. Ayudará también a sumar nuevas matriculaciones que el Gobierno acelere las medidas para impulsar los puntos de recarga rápida y las ayudas directas para vehículos electrificados. Con un mercado por debajo del millón de unidades existe un riesgo real de pérdida de inversiones y empleo", puntualizó.
Por su parte, el director de Comunicación de Faconauto, Raúl Morales, indicó que el mercado no pudo cambiar en 2022 su tendencia negativa, a causa de los "persistentes cuellos de botella en el aprovisionamiento de vehículos, lo que ha condicionado mucho la actividad de los concesionarios".
"La incertidumbre con la que cerramos 2022 nos impide vislumbrar un cambio para este 2023. Manejamos dos escenarios: un crecimiento escueto del 5%, es decir, 870.000 unidades, al que habría que sumar un 10% adicional si se solucionan los cuellos de botella en la producción, con lo que nos iríamos a 960.000 unidades. Ninguna de las dos previsiones es una buena noticia, porque estamos muy lejos de las cifras que veíamos antes de la pandemia", subrayó.
"En este tercer ejercicio seguido en negativo, en el que se han registrado unas 400.000 unidades menos que antes de la pandemia, la falta de oferta ha hecho mella en el mercado y todo apunta a que, aunque con menor intensidad, lo seguirá haciendo en 2023, con el riesgo que supone para el empleo y la competitividad del sector", destacó la directora de Comunicación de Ganvam, Tania Puche.
Además, añadió que, en un contexto en el que el ritmo de electrificación todavía no ha alcanzado la velocidad de crucero, reenfocar las estrategias de descarbonización para conseguir parar en seco el envejecimiento del parque "se convierte en objetivo prioritario para este curso que acabamos de estrenar".
En cuanto a las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los automóviles matriculados en España durante el ejercicio pasado, la cifra media se situó en 119 gramos por kilómetro recorrido, una rebaja del 2,3% respecto a los datos de 2021.
A este descenso de las emisiones de CO2 contribuyó el avance de los modelos electrificados y de energías alternativas, que coparon el 40,9% del mercado anual, por delante de los modelos diésel (17,2%), mientras que los de gasolina representaron el 41,9% de las ventas.
En diciembre, los automóviles de gasolina alcanzaron una cuota de mercado del 39,9%, al tiempo que los modelos diésel llegaron al 16,4% del mercado y los de otras energías se hicieron con el 43,7% del total de las matriculaciones nacionales.
En el conjunto del año, los monovolúmenes pequeños fueron el segmento de mercado que más cayó, con un retroceso del 49,5%, mientras que la mayor progresión fue para los todoterrenos, con un aumento del 35,5%. En diciembre, solo los modelos deportivos, con una subida del 8,3%, y los premium, con un avance del 8,4%, escaparon de los descensos generalizados de ventas.