El alcalde de Alicante, Luis Barcala, tras tomar posesión de la vara de mando, en el pleno de investidura. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. La propuesta de distribución de retribuciones y cargos de confianza con aumentos salariales de entre el 5 y el 10% planteada por el alcalde de Alicante, el popular Luis Barcala, no encuentra, por el momento, el respaldo necesario de los grupos de la oposición. Ninguno de los representantes de PSPV-PSOE, Unides Podem EU, Compromís y Vox consultados por Alicante Plaza después de que se diesen a conocer los pormenores de esa propuesta pudo confirmar que estaría dispuesto a aceptarla.
Es más, al menos Unides Podem EU incluso expresó abiertamente su rechazo a ese planteamiento al considerar innecesaria la subida de las remuneraciones que se contempla. Su portavoz municipal, Xavier López, apuntó que "las retribuciones vigentes del mandato anterior son mas que dignas" y añadió que existen "necesidades mas urgentes". Así, señaló que el planteamiento supone "no entender en qué momento se encuentra la ciudad de Alicante donde la precariedad y el aumento de población en exclusión es la tónica general en muchos de nuestros barrios, tal y como indican los sucesivos informes publicados desde los servicios sociales municipales".
El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, apuntó que será la asamblea de la coalición quien analice la propuesta la próxima semana. Con todo, hasta el momento sí ha venido defendiendo que la prioridad para su grupo era poder contar con las plazas de cargos de confianza necesarias para poder apoyar su labor de oposición, antes que plantear un incremento salarial de todos los concejales de manera general.
Su homólogo del PSPV-PSOE, Paco Sanguino, señaló que, hasta este jueves, no había tenido información oficial sobre las condiciones de esa propuesta y recordó que él mismo había sugerido al primer edil otra fórmula de reparto alternativa, sobre la que todavía no se le había dado respuesta.
Por último, los representantes de Vox consultados se limitaron a señalar que el grupo todavía no había adoptado una posición definitiva sobre la propuesta.
En esa tesitura, la propuesta de distribución de emolumentos y plazas de asesores planteada por Barcala sólo tendría asegurado el voto a favor de los 14 concejales que conforman el bipartito: 9 representantes del PP y 5 de Ciudadanos (Cs). El partido de Albert Rivera es, de hecho, el que obtiene un mayor rédito por lo que concierne al reparto del número de asesores, en la medida en que contaría con hasta 7 plazas con dedicación completa: una por cada edil con competencias de gobierno y dos más asignadas al grupo político (las mismas que PP y PSPV, pese a que ambos grupos cuentan con 4 concejales más).
En principio, todo parece indicar que la propuesta se debatirá en un pleno extraordinario que podría celebrarse el próximo jueves. Para que la propuesta prospere, el bipartito debe sumar más votos a favor que en contra, lo que supone que debe contar con el apoyo o la abstención de al menos un concejal de alguno de los grupos de la oposición.
