ALICANTE. Tras el choque ante el Granada, el portero del Elche, Edgar Badía, no escondía su desazón por no haber logrado una necesaria victoria, pero también pedía que se valorase en su justa medida el punto obtenido.
"No estoy contento, queríamos empezar el año con un victoria, terminar la primera vuelta con 18 puntos, pero es un punto con mucho valor", decía el meta barcelonés, destacando "el esfuerzo del equipo" y cómo se había "sobrepuesto a las bajas" motivadas por el Covid-19 primero y a las sufridas durante el desarrollo del partido, concretamente la expulsión de Diego González. Edgar era interpelado precisamente por las discutidas decisiones arbitrales, mostrándose al respecto muy diplomático: "Los árbitros tratan de hacerlo lo mejor posible y a veces se equivocan, eso es parte del fútbol. Hoy nos han perjudicado, pero espero que al final se equivoquen más a favor que en contra nuestra", decía el portero franjiverde, añadiendo que "la línea entre la victoria, el empate y la derrota es muy fina" y son pequeños detalles los que al final les están penalizando, ("Como el día del Valencia"), destacando a continuación que el equipo "compite siempre": "Hemos corrido por los que estaban en casa, somos un equipo muy unido y con una identidad", señalaba.
El Elche sabrá este lunes si cierra la primera vuelta fuera de las posiciones de descenso o no, pero lo que es seguro es que lo hará con 16 puntos, una suma que de repetirla en la segunda mitad del curso no parece que pueda permitir al equipo eludir el descenso. Edgar Badía se mostraba tranquilo al respecto, convencido de que mejorarán la puntuación de la primera vuelta y ponía el acento en que cada vez defienden mejor y prueba de ello era haber cerrado con la portería a cero el choque contra el Granada, en el que jugaron toda la segunda mitad en inferioridad numérica".
