ALICANTE. El segundo bloque del Foro AP: "La Gestión de los ERTE", consistió en un debate en el que los participantes aportaron su visión de cómo se ha gestionado los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo y, también intervenciones con las dudas, problemas o imprevistos que han ocasionado a lo largo de meses de Estado de Alarma. Esta mesa debate estuvo formada por María Antonia Oliva Verdú, presidenta del Colegio de Graduados Sociales de Alicante; David Devesa, socio fundador y CEO de Devesa y Calvo; Nacho Amirola, director de Aquami; José Antonio Galán, socio director de Galán y Asociados; Pedro Algarra, socio director de Galsán Consutores y Cayetano Sánchez, socio director de Sánchez Butrón.
Ante la cuestión planteada ¿Cómo han visto el instrumento de los ERTE o si ha existido problemas de interlocución con la administración?, si bien hubo consenso total en que los ERTE son herramientas necesarias y positivas, también ha habido trabas en su tramitación.
María Antonia Oliva mantiene que "ha sido maremagnum de trabajo y consultas y que en su relación con la administración han tenido problemas. "No se estaba preparado ni se disponía de la tecnología para tender el volumen de consultas". Ahora opina que vienen momentos de incertidumbre y que "las empresas van a sufrir" y que, mientras ha tramitado ERTE en estos meses, cree que en unos meses llegarán "opciones de concursos de acreedores".
Para Pedro Algarra, los ERTE son "herramientas de primer nivel, necesarias par la economía del país y que han funcionado", aunque apunta que echa de menos que en la administración "no se haya agradecido a los asesores el trabajo aportado durante estos meses, porque hemos trabajado estos ERTE para dar toda la información "masticada" a los trabajadores". Su principal duda ahora es cómo se actuará según los ERTE o los ETOP y la preocupación de que haya "muchos más desempleos por el fin de contratos temporales o de fijos discontinuos".
Asimismo, José Antonio Galán planteó su preocupación por que "hoy, aún existe un 50% de personas en ERTE, es un paro encubierto, y echo en falta medidas para la empresa, para que esas personas no vayan al desempleo". De este modo, reclama medidas de financiación que no sean para aplazar momentos . "No veo medidas de respuesta a problemas, hay anestesia para los enfermos, pero no la solución". También añadió que "no podemos seguir financiando el desastre, necesitamos que las empresas se reactiven pero no veo ayudas".
Además, Nacho Amirola, mantuvo que "aquí hay empresas que han parado al 100% y, en muchos casos, se podía haber evitado" y apostó por que se siga trabajando, en la medida de lo posible y con la producción disponible. También consideró que "la recuperación no llegará sola y el problema llegará cuando en el primer semestre de 2021 haya que devolver los créditos ICO. ¿Podrán las empresas?". Ve como una ventaja poder prever, en esta crisis, lo que puede pasar en un año para, así, actuar antes.
En este sentido, David Devesa, afirma que, desde su despacho de abogados han comprobado "cómo el tsunami que hemos vivido ha creado un estrés brutal en los clientes y también en los equipos y tesorería". También asegura que los abogados laboralistas han formado a clientes y resuelto muchas dudas. Asimismo, afirma que el momento ha exigido "un compromiso muy fuerte de los profesionales, porque los clientes tenían que saber que estaban ahí".
Por su parte, para Cayetano Sánchez, "hemos parado el reloj con los ERTE, pero se pondrá en marcha y lo haremos con una mochila, la reactivación". Sánchez considera que hay que "poner imaginación" como salida a una situación que irá yendo a una normalidad "poco a poco". Apostó por introducir medidas de flexibilización en las empresas para que "no se vayan todos a la calle por un cierre de persianas por concursos de acreedores". Considera que el sector no aguantará el sistema de ERTE y apunta a medidas de otros países en las que se han complementado salarios.
Para el socio director de Sánchez Butrón "la administración pública ha estado bien en lo más esencial y necesario, pero hay gran parte en la que no ha funcionado, como en los niveles de atención en los juzgados". Apuntó a que parte de las administraciones no trabajan porque no han podido organizarse y que eso paraliza la actividad.
El CEO de Devesa y Calvo mantiene que los ERTE conllevan "una segunda lectura, que es la de abordar la factura fiscal del gasto público" y que "no se recuperará, quizá hasta 2023". A Devesa le preocupa que "la recaudación baja y en los bancos nos vamos a encontrar un escenario de tormenta perfecta". No obstante aborda que la dependencia de los sectores del turismo y la restauración se notará pero que contempla el panorama con "moderado optimismo".
Para el director de Aquami, "hay que esforzarse para sostener el tejido empresarial y hacer que las empresas vuelvan a ser rentables". Para ello, apunta a la clave de repensar modelos de negocio y también a que puedan contar con incentivos fiscales que aporten y ayuden a la rentabilidad para que se recuperen las cifras de empleo. "Compartimos el objetivo de que hay que luchar y esforzarse".
Por su parte, el socio director de Galán y Asociados expresó lo que considera un "deseo utópico: que todos tuviéramos altura de miras y que nos dejáramos de luchas políticas y trabajáramos más por salir. Creo que miramos a muy corto plazo". No obstante, confía en que "la sociedad española ha demostrado que tiene capacidad para ello y que con altura de miras saldríamos rápido y muy bien".
Asimismo, el socio director de Galsán Consultores es optimista con la salida de la situación desde el punto de vista de la provincia. "El 75% del sector productivo es de pequeñas y medianas empresas que generan el 85% de empleo y la recuperación será como una mancha de aceite". También señaló que "en un par de años la industria estará a niveles prepandemia" y que los clientes son "duros y valerosos y tienen resistencia antiendeudamiento tras la anterior crisis".
Además, la presidenta del Colegio de Graduados Sociales de Alicante mantuvo que los ERTE son medidas adecuadas pero que podían haberse regulado con una gestión más automática y que "se ha de reactivar la comunicación con las administraciones, que puedan atender a nuestras peticiones y dudas sin colapsarse los servicios". Pide renovación en el modo de trabajo de la administración y "remar en la misma dirección".