Fotos PEPE OLIVARESALICANTE. La también concejala de Turismo del Ayuntamiento de Alicante, Mari Carmen Sánchez, además de la turbulenta situación de su partido, Ciudadanos, también aborda en esta conversación el fin de la temporada turísticas y los retos del futuro, como la hipotética aprobación de la tasa turística por parte del Consell, o las perspectivas de la temporada de invierno, con la inflación como principal amenaza.
-A raíz de las cifras que han salido, ¿ha sido un buen verano para la ciudad de Alicante?
-Las cifras así lo avalan. Estamos a la espera de que tanto la Asociación Provincial de Hoteles como la Asociación de Bloques Turísticos, nos den los datos de agosto. Pero la realidad era palpable en la calle. Ya el año pasado no solamente habíamos recuperado los índices de prepandemia, sino que ya lo hemos superado un poquito. Este año, desde luego, ha sido un año de récord, incluso las visitas al castillo. Santa Bárbara es uno de los de los baremos y se han disparado. Creo que tan solo un mes habíamos recibido más de 100.000 visitas en el mes de julio. Estamos a la espera de los datos de agosto, pero sin duda son muy buenos y estamos francamente satisfechos con la gran acogida que ha tenido Alicante como destino turístico de verano.
"Nos hemos encontrado con un elemento con el que no contábamos, que es la inflación, que cada vez se está endureciendo más la situación económica"
-Y qué va a pasar el invierno o lo que queda de temporada. ¿Va a ser uno de los inviernos como los de antes?
-Pues ojalá. Y no será por el trabajo que se está realizando desde el Patronato de Turismo, porque estamos haciendo campañas precisamente para fidelizar el turismo de congresos, de incentivos, deportivo, musical, etc, precisamente para que haya oferta durante los meses de invierno o de temporada baja, media baja. El problema es que nos hemos encontrado con un problema con el que no contábamos, que es la inflación, que cada vez se está endureciendo más la situación económica. No voy a decir de toda Europa, pero es una situación mundial. Entonces, ya en agosto sí que es verdad que notamos un cierto frenazo a la hora de las reservas y que esperemos que sea lo mejor posible en los meses de temporada baja. Es un contrapunto con el que contra el que no podemos luchar, porque como digo, es una crisis mundial la que se está generando y esperemos que que por parte de los turistas sigan eligiendo Alicante. Son muchos los atractivos que tiene Alicante, no solamente de conectividad, sino también incluso de relación calidad-precio.
-Usted lo ha manifestado en determinadas ocasiones que está en contra de la tasa que pretende implantar la Comunitat Valenciana, pero bueno, en otras ciudades en València se plantean como un poco más dirigida a cruceristas y apartamentos. ¿Qué opinión le merece? ¿Hay debate?
-No hay debate. En primer lugar, porque es el cuento de la lechera que nos están vendiendo de que la tasa va a ser optativa y que la tasa para unos y para otros no; es una tasa para aquí, y para todos. Y sabemos por los estudios que incluso la propia el propio turismo de la valenciana en un informe redactado por la Universidad de Alicante. Los datos son demoledores, principalmente. A quien más va a arrastrar es al propio ciudadano de la Comunitat Valenciana. Y que la cosa, la situación después de la pandemia que hemos estado viviendo, aunque ahora mismo se están recuperando todos los índices, pero no podemos estar jugándonos la constantemente y atacando a un sector que ha sido uno de los más penalizados en estos años. No podemos generarnos nosotros solos una competencia de base con otros destinos turísticos cercanos y que ofrecen exactamente los mismos productos que nosotros. Nos estamos tirando piedras en nuestro propio tejado. Creemos que no se puede imponer una tasa sin escuchar al sector turístico y una vez la apruebas, querer que reunirte con ellos y que estén a favor. Es que eso es imposible. Creemos que esta tasa surge del total desconocimiento y de pisar mucha moqueta, y conocer poco al sector turístico.
"No podemos generarnos nosotros solos una competencia de base con otros destinos turísticos cercanos y que ofrecen exactamente los mismos productos que nosotros"
-Antes han hablado del del tema del castillo, que se ha revitalizado. No sé si a lo largo de estos últimos meses habéis notado un índice también que os haya sorprendido de cosas que hayan vuelto a la normalidad positiva.
- Por ejemplo, el tema de los cruceros. Sí, obviamente. Bueno es el sector que todavía sigue teniendo restricciones por normativa. En general sigue teniendo un mayor control en cuanto a vacunaciones o pruebas de PCR, pero al final es que estamos hablando de un grandísimo número de personas que tienen que convivir 24 horas en un barco, pero prácticamente todo ha vuelto a la normalidad. Seguimos recuperando número de escalas y el puerto base se está reforzando. En dos semanas volvemos a la cita de Málaga, que es la Feria Europea de Cruceros, a seguir intentando captar más navieras para ver si reforzamos el Puerto. La Asociación de Alicante por el Turismo de Cruceros también sigue apostando con distintos trips a navieras para que vengan y en situ puedan ver los puntos fuertes de Alicante. Las cifras al final están avalando también a la gastronomía. Este verano, si no reservas, si no tenías mesa no podías comer; el castillo está funcionando como un tiro y los conciertos prácticamente han estado con un sold out.
"Seguimos potenciando el sector de incentivos, que eso es muy interesante, que sigue repercutiendo. Es una pequeña rama dentro del turismo de congresos"
-¿Qué previsión hay para el tema de congresos para la temporada baja?
-Pues ahí vamos poco a poco, porque sí que es cierto que durante un tiempo se estuvo un poco más congelado y se compaginaba mucho con el semipresencial. Eso echó un poco el freno, pero seguimos trabajando para seguir captando y ya no solamente turismo de congresos que les viene fenomenal. Seguimos potenciando el sector de incentivos, que eso es muy interesante, que sigue repercutiendo. Es una pequeña rama dentro del turismo de congresos, pero que en ese aspecto Alicante tiene muchísimos puntos fuertes por la gran cantidad de diversidad de actividades que se pueden realizar tanto en la ciudad como en sus cercanías de todo tipo y que son un fantástico revulsivo para parar el sector turístico.
