ALTEA. El Ayuntamiento de Altea ha elaborado los nuevos pliegos que regirán la licitación para los chiringuitos y quioscos de sus playas. Se trata de uno de los atractivos de la localidad que compiten con municipios turísticos como Benidorm que carecen de este ocio en sus arenales y que se han ganado algunos de ellos el calor del público por su gastronomía. De este modo, el Consistorio volverá a montar los mismos proyectos que años anteriores, pero habrá condiciones distintas.
Según explicó el concejal de Playas, Diego Zaragozí, entre las novedades está la condición de que se puedan presentar solo a uno de los bares para evitar que una empresa se haga con toda la oferta. El plazo para la gestión de los mismos es para los años de 2023 a 2025, sin posibilidad de prórroga.
En concreto, salen a licitación cuatro chiriguitos, los situados en el sur y el norte de la Playa de L'Olla, y otros dos en el norte y sur del Mascarat. Por los dos primeros se estima un canon a pagar de 10.000 euros anuales, mientras que para el resto es de 3.500 euros al año. Para ello, el Consistorio ya ha sacado a licitación los pliegos, que desde el pasado 30 noviembre tiene el plazo abierto para la presentación de ofertas y termina el próximo 30 de diciembre.
Pero como se decía, también buscan nuevas empresas para la gestión de los quioscos a pie de playa por el mismo periodo. La licitación se inició el mismo día que el de los chiringuitos, pero las condiciones son diferentes. Serán dos instalaciones, las ubicadas en en Cap Blanc y l'Espigó Norte, y salen por un cánon cada uno de 4.000 euros anuales.