ALICANTE. El coronavirus amenaza con hacer un buen roto también al sector de los festivales. Se baraja que la crisis desatada por el COVID-19 pueda llegar a su pico más alto de contagios a mediados o finales de abril. A partir de ese momento, las autoridades sanitarias prevén que se inicie un descenso de contagios, al tiempo que se irá produciendo un aumento progresivo de las altas médicas a los contagiados que hayan superado la enfermedad. Además, tampoco se conoce muy bien hasta qué punto podrán ir recuperándose las reuniones masivas de gente en recintos tan multitudinarios.
Esos plazos coinciden de lleno con la apertura de la temporada de festivales musicales, que a partir de abril-mayo siembran la Comunitat Valenciana y España. De hecho, uno de los primeros en el calendario, el festival Fuzzville!!! que se debía celebrar en Benidorm del 27 al 29 de marzo, ya anunció la semana pasada que suspendía todos sus conciertos, emplazando al público a la edición de 2021 e informando de la devolución del dinero de todos los tipos de entradas vendidas hasta el momento.
Producciones Baltimore, promotora del evento, se apresuró a dar una respuesta rápida ya que el Estado de Alarma —que no se había anunciado, pero sí se preveía— afectaría plenamente a las fechas en las que se iban a producir los conciertos. La misma promotora, responsable del Warm Up en Murcia (1-2 de mayo), Spring Festival en Elche (29-30 de mayo) y Low Festival en Benidorm (del 31 de julio al 2 de agosto), ha comunicado este martes nuevas decisiones al respecto de esta crisis y que afectan al festival murciano trasladándolo en el calendario hasta después de la temporada estival, el 1-2 de octubre. Además, también devolverán el importe de las entradas.
Después de la cancelación del Warm Up, ahora la sombra de la duda se extiende sobre el Spring Festival y todo hace indicar que en breve podría saltar por los aires, aunque todavía podrían esperar hasta mediados de abril para tomar una decisión al respecto. En el peor de los casos, también se podría aplazar el Low Festival. Sin embargo, en este caso todavía hay margen de sobra para que se puedan mantener las fechas anunciadas y que todo siga en pie tal y como estaba previsto.
Sobre estos eventos, Producciones Baltimore no ha tomado ninguna decisión todavía, sino que manifiestan su deseo de que para entonces esté arreciando el temporal: "ojalá haya mejorado la situación para esas fechas", afirmaban a preguntas de Alicante Plaza. Por el momento, están tomando decisiones sobre Fuzzville y Warm Up, que son los que están más cerca. "Estamos trabajando entre todos para buscar las mejores soluciones, pero iremos siguiendo las pautas del Gobierno sobre lo que está permitido y en qué fechas, para ir decidiendo cuando se acerquen ambos festivales", afirma la organización
La polémica se desataba también en redes sociales a raíz de un comentario que realizaba en Twitter una habitual del festival murciano Warm Up, quien había comprado su abono e instaba a la promotora a devolver el dinero de las entradas si se cancelaba el evento. En su tweet, destacaba un apartado de la página web del festival en el que la promotora se escudaba, textualmente, ante casos de "pandemia" o "estado de alarma", y sembraba la duda sobre si ese aspecto se había añadido a posteriori en las bases, destacando el artículo:
"No será devuelto el importe de la entrada cuando la cancelación del festival sea ocasionada por factores tales como las malas condiciones climatológicas, desastres naturales, cierre del espacio aéreo español u otras causas de fuerza mayor no dependientes de la organización del festival, como epidemias, pandemias o similares, así como cuando sean declarados los estados de emergencia o excepción, alarma o sitio por la autoridad competente".
El perfil oficial del evento respondía asegurando que todavía no se había tomado ninguna decisión al respecto. Una decisión que sí ha llegado este martes, cuando se ha anunciado la suspensión del Warm Up y se ha renunciado a aplicar ese artículo presente en la política de devoluciones asegurando que, una vez finalicen los cambios que se puedan producir en el line-up del cartel, se permitirá realizar cambios y devoluciones de entradas. "Sí ha existido esa cláusula, pero aún así, todo el equipo ha llegado a la conclusión de que, en esta situación tan dura que estamos pasado, lo más adecuado era devolver las entradas a todo aquel que lo solicitase", afirmó la organización.
Los festivales de primavera se suspenderán y se mantiene la duda sobre los que se celebran en verano, ya que todavía no se conoce el alcance que puede llegar a tener esta pandemia ni el tiempo en el que se desarrollará. Mientras tanto, todos los eventos de ocio se cancelan. Una decisión necesaria para salvaguardar la salud, pero que conllevará pérdidas millonarias para el sector cultural. Según un primer balance realizado por diferentes colectivos profesionales, la industria musical de la Comunitat Valenciana se enfrenta a posibles pérdidas de 8.660.000 euros hasta finales de mayo, a causa de esta crisis sanitaria. Una valoración que es también provisional, para la que han consultado a más de cuarenta empresas valencianas del sector, desde la Asociación de Promotores (MusicaProCV), hasta managers (Valencian Music Association-Fira Trovam!), así como salas (En Viu!) y otras empresas artísticas.