ALICANTE. La empresa alicantina de gestión de impuestos Grupo GTT suma y sigue. El cambio accionarial acometido este verano, con la salida de los fondos españoles GED y Oquendo, y la llegada del británico AnaCap, no ha variado el rumbo de la firma fundada por Fernando Plaza y el equipo original de Suma, que sigue ampliando su cartera de contratos con ayuntamientos y diputaciones.
Así, la empresa alicantina especializada en la gestión de tributos municipales y autonómicos se ha adjudicado su primer gran contrato de esta nueva etapa con el Ayuntamiento de Santander. La oferta de GTT, la mejor valorada de las dos que llegaron, es por 4,6 millones para los próximos tres años, según la resolución de adjudicación. La empresa de Plaza tendrá que prestar el servicio de colaboración en materia de gestión tributaria, recaudación de tributos y demás ingresos de derecho público del Consistorio cántabro.
Este contrato se suma a otras grandes adjudicaciones que se ha llevado GTT este año, incluso durante los meses del confinamiento, como ha ido contando este periódico. Entre todos, destacan los de la Diputación de Álava, que puede reportarle hasta 9 millones en tres años (GTT cobrará un porcentaje del volumen gestionado), y el del Ayuntamiento de Sagunto: 1,5 millones por subir a la nube su sistema de cobro. En lo que va de 2020, la cartera captada por GTT se acerca ya a los 20 millones de euros.
La empresa de Fernando Plaza terminó el año 2019 con más de 3.000 ayuntamientos, 15 diputaciones provinciales y dos comunidades autónomas como clientes, a las que se han sumado las nuevas contrataciones cerradas este año, cuando los administradores de la empresa esperaban un crecimiento de su porfolio que se está concretando a medida que pasan los meses. La inversión estratégica de GTT en su software de gestión es clave en su posición de liderazgo en su sector, pues no solo se encarga de gestionar el cobro, sino que también presta asesoramiento e incluso vende su sistema.
Como publicó Alicante Plaza el pasado 26 de septiembre, GTT se anotó un beneficio de 5,2 millones de euros en 2019, el último ejercicio antes de la venta, con una facturación de 34,4 millones de euros (un 3,3% más). En tres años como accionista mayoritario de la empresa, GED ha visto a GTT arrojar 10,5 millones de euros en beneficios.
El pasado mes de julio, el fondo británico AnaCap se hizo con el 95% de la empresa por una cantidad cercana a los 120 millones de euros. Al contrario que en 2017, cuando GED entró como accionista mayoritario con el 75% de la empresa, en esta ocasión Oquendo también ha vendido su parte, de forma que los británicos poseen casi la totalidad del capital de la empresa (el otro 5% sigue en manos de los fundadores). Desde la empresa se indicaba días después de trascender la venta que "tras más de 20 años de trayectoria y sin haber abandonado su posición de liderazgo, GTT afronta una nueva renovación y cambio en su accionariado", un proceso que, aseguraron, "la empresa realiza de forma cíclica y planificada".