ALICANTE. Ante los intentos del alcalde de Alicante, Luis Barcala, de llevar a pleno una modificación del Reglamento de Organización del Pleno (ROP), con el fin de dar derechos políticos y económicos a la concejala no adscrita, Nerea Belmonte -cuyo voto en blanco fue crucial para que el PP recuperara la Alcaldía-, el grupo Ciudadanos ha pedido que esa reforma quede en stand by y que no se lleve a cabo hasta que la Fiscalía finalice su investigación.
La reforma está abocada al fracaso porque cuatro grupos de la corporación, PSPV, Guanyar, Ciudadanos y Compromís, ya han anunciado su rechazo, por que sólo el PP, con 8 regidores, y los dos no adscritos, la propia Nerea Belmonte y el ex de Ciudadnos Fernando Sepulcre, votarían a favor de la propuesta que eleva a pleno el propio alcalde.
Pero a juicio de Ciudadanos, antes de que se aborde de nuevo ese proyecto de organización interna del pleno, la cuestión debería quedar sobre la mesa y esperar a que finalicen las investigaciones de Fiscalía, donde se intenta averiguar si el voto en blanco de Belmonte estuvo condicionado por alguna razón. En estos momentos, hay dos denuncias sobre los mismos hechos. Por una parte, la propia Belmonte ya reveló en el pleno siguiente a la investidura de Barcala que le habían ofrecido un sueldo de 3.500 euros y un puesto en las listas electorales para que apoyara a la candidata socialista, Eva Montesinos, hechos que investiga la Fiscalía Anticorrupción. Por esta cuestión, ya prestó declaración la propia edil no adscrita.
Y por otra parte, también se investiga la contratación posterior de Redondo por el PP en el marco de otras diligencias independientes incoadas tras una denuncia de la oposición, que considera el contrato de Redondo como una contraprestación al voto en blanco de Belmonte que permitió a Barcala acceder a la alcaldía el pasado mes de abril, en detrimento de la socialista Eva Montesinos.
Según los denunciantes, el nuevo alcalde del PP le contrató en realidad para que ejerciera como asesor de la regidora no adscrita. El fiscal encargado de esas últimas pesquisas, José Llor, ha citado esta semana al exasesor, que fue despedido por Barcala apenas unas semanas después de su fichaje, para poder interrogarle como testigo.
Por su parte, el portavoz del grupo municipal de Compromís, Natxo Bellido, ha anunciado que su grupo presentará su propia propuesta de reforma de ROP, que priorice la participación ciudadana y dé mejor trato a los grupos de la oposición. Por esta razón, Bellido cree que no es el momento de tramitar trajes a medida del transfuguismo político, como, en su opinión, pretende ahora el PP y, por lo que pide su retirada. En contrapartida propone, que se reúnan todos los grupos municipales y puedan hacer sus propuestas para mejorar el ROP y que "se supere el castedazo que es el actual ROP".