radiografía de las tensiones del gobierno estos tres años

Últimos días para una moción de censura en El Campello; ¿gobernará Cs con la izquierda?

9/06/2022 - 

EL CAMPELLO. Después de que el alcalde de El Campello, Juanjo Berenguer (PP), anunciara ayer que apartaba del gobierno a Ciudadanos, quien durante estos tres años ha sido uno de sus dos socios, la posibilidad de una moción de censura resuena con fuerza. Habría que ver si existe un plazo legal máximo para presentarse el voto de censura.

Ofertas hay. En el pleno extraordinario que se celebró previamente al anuncio de Berenguer y sus ediles populares, el PSOE tendió abiertamente la mano a Cs para formar un nuevo gobierno, emplazándolo a sentarse con la formación socialista porque "Berenguer ni ha dimitido ni lo hará. Cs solo tiene una salida: apoyar un gobierno progresista que dé solución a la paralización y nosotros estamos aquí para dar viabilidad a ese gobierno. El señor Berenguer hoy es alcalde porque ustedes (Cs) quieren que lo sea y ustedes serán corresponsables de sostener ese gobierno", ha señalado el portavoz socialista, Vicent Vaello.

También Podemos abre la puerta a una nueva ejecutiva en el ayuntamiento, cuyo portavoz, Eric Quiles, ha manifestado que después de esta "muerte anunciada del gobierno de la derecha" que su posición es la de "intentar buscar los apoyos para formar un gobierno progresista, con Cs si fuera necesario". Y ha confesado que la verdadera voluntad del grupo era que Juanjo Berenguer, "máximo responsable del fracaso de este gobierno y de cómo ha quedado el municipio, hubiera dimitido".

Por lo que respecta a EU, su portavoz, Pedro Mario Pardo, no descarta la posibilidad de que salga adelante una moción de censura "mientras hablemos de proyecto". Es decir, si se aseguran unas líneas comunes de trabajo en el que fuera el nuevo equipo de Gobierno, como abrir la piscina, sacar adelante el Plan General, atajar el tema de las productividades y horas extra, etc. "El PP es el máximo responsable de las grandes catástrofes de este municipio, como la piscina, el vertedero, el parking y muchos otros asuntos", ha criticado.

En cuanto a Compromís, Benjamí Soler, portavoz de la formación, ha declarado que el "desgobierno" de PP y Cs "ha provocado la parálisis total del ayuntamiento, demostrando cada día su incapacidad de gestión e irresponsabilidad total al introducir sus luchas partidistas en la estructura municipal", asegurando que "de la crisis material y de recursos será relativamente fácil salir, pero de la crisis estructural a la que han arrastrado al ayuntamiento, veremos si alguien propone y qué propone para intentar revertirla". Pero ha manifestado que hablar de moción de censura "a menos de un año de las municipales puede parecer una quimera. La solución nunca podrá venir de quienes son parte del problema. Dicho esto, es el momento de hablar, pero para poder avanzar".

También el tercer socio de gobierno campellero, VOX, a través de su portavoz, María José Sañudo, se ha pronunciado sobre la situación vivida estos días, atribuyendo estos movimientos a una "pugna interna que tanto Cs como el PP deberían haber resuelto hace ya muchos meses. Cs debería haber dejado el equipo de Gobierno cuando hace un año, supuestamente, intentó una moción de censura junto al PSOE, que, aunque no se llevó a término, dinamitó el equipo de Gobierno. Desde entonces, Cs ha hecho oposición dentro del equipo de Gobierno y el PP lo ha consentido. Creo que se debería haber tomado esta decisión antes, porque la gestión municipal se ha resentido".

Las incomodidades de estos tres años

A lo largo de los tres años que PP y Cs han gobernado juntos (y VOX, pero sin concejalías) ha habido ciertos temas que han evidenciado la brecha existente entre las dos formaciones principales del gobierno campellero. Una de las más sonadas ha sido la subida del precio del agua por la desaladora de Mutxamel. Un asunto en el que PP votó a favor y Cs, en contra de la revisión de las tarifas de agua potable y a la modificación del convenio entre Acuamed y el Ayuntamiento sobre las obras de la desaladora.

Algunos asuntos que han dinamitado el pacto entre Cs y PP han sido la subida del precio del agua por la desaladora, los presupuestos para 2022 o que el alcalde asumiera la concejalía de contratación

Un asunto en el que Julio Oca, portavoz naranja, denunció "presiones" por parte del alcalde, afirmando que le "intentó quitar de la firma de un informe técnico del Departamento de Infraestructuras y mandó que se hiciera un expediente paralelo para poder seguir la tramitación de este punto" sin la firma de Oca, "como así ha sido". Como respuesta a estas acusaciones, el alcalde, Juanjo Berenguer (PP), defendió que no fue presión, sino llamadas "reiteradas" para que Oca "diera el visto bueno o rechazara el informe que ya habían firmado los técnicos y ante el bloqueo de un informe yo hice otro expediente".

La tensión entre ambas formaciones también latió con fuerza en verano de 2021, cuando el portavoz de Cs y primer teniente de alcalde denunció el "caos" al que se vería abocado el ayuntamiento si no se renovaba el puesto de trabajo del arquitecto municipal y responsable del servicio de Playas. En el comunicado, Oca acusaba directamente a RRHH, concejalía que dirige Lourdes Llopis (PP), tildando la decisión de "unilateral desde la concejalía de Recursos Humanos y Alcaldía, sin ni tan siquiera habérsele comunicado previamente". 

Ante estas acusaciones, la portavoz del Partido Popular y responsable de RRHH, Lourdes Llopis, invitó a los ediles de Cs a que abandonaran la coalición. "No entiendo que si tanto les desagrada estar ahí permanezcan en sus cargos. Por ética política, por coherencia y por dignidad, deberían irse de forma inmediata", declaró.

Los presupuestos para 2022 también fueron -y han seguido siendo- motivo de disputa. Primero, Cs aseguraba que el PP le había dejado fuera de las negociaciones y había obviado sus peticiones, por lo que la formación naranja presentó su propio borrador, recalculando las partidas que creía infradotadas. Sin embargo, los populares aseguraban que sí se había contado con todos los grupos que integran el equipo de Gobierno para elaborar el documento presupuestario. En la actualidad, las cuentas para el año en curso siguen sin aprobarse y Cs expresó en la rueda de prensa del pasado martes que no apoyaría unas cuentas con infradotación de ciertas partidas.

Misma rueda de prensa donde la formación naranja pidió la dimisión de Berenguer y donde Javier Giner (Cs), el hasta entonces concejal de Contratación, anunció que dejaba el cargo por el bloqueo legal y administrativo del Ayuntamiento, además de por motivos personales y familiares. No es el primer responsable de Contratación que dimite, de hecho llevaba cinco meses en el cargo. Antes lo ocupó su compañero de filas Javier Martín, quien renunció al acta de edil y se retiró de la vida política por problemas de salud.

Un movimiento que provocó que el alcalde se quedara con las competencias de Contratación, que pertenecían a Cs por pacto de gobierno al inicio de la legislatura. En aquella ocasión, se justificó que el nuevo edil de Contratación no podría prestarle la atención requerida porque solo estaría a tiempo parcial en el ayuntamiento debido a su trabajo como docente. Durante las semanas que Berenguer ostentó contratación, Cs pidió que se le devolviera la concejalía y, cuando así se hizo, se firmó un decreto que eliminaba a los políticos de las mesas de Contratación, pasando a estar formadas solo por altos funcionarios y técnicos municipales. Esto cabreó notablemente a Cs, que criticó que "si el PP no ostenta Contratación, los políticos salen de las mesas".

También es relevante mencionar que El Campello no se presentaba como una oferta en Fitur, sino que se diseñaban dos campañas por separado: por un lado, la de Turismo (PP), -por ejemplo, mostrando el municipio como plató de cine- y, por otro, la de Igualdad (Cs) -proponiendo que la localidad fuera un destino LGTBIQ+ friendly-.

Noticias relacionadas

next
x