ELCHE. La medida estrella del nuevo Consell del PP y Vox en materia turística era en realidad una 'no medida': no aplicar la controvertida tasa turística que sacó adelante el Botànic en la recta final de su segundo mandato, tras casi ocho años intentándolo. Obviamente, tras formar Gobierno, una de las primeras medidas del nuevo Ejecutivo autonómico ha sido precisamente esta, algo que puso en valor este jueves la nueva consellera del ramo, Nuria Montes (ex secretaria general de la patronal hotelera Hosbec), ante centenar y medio de empresarios reunidos por la CEV en el auditorio de IFA, en Elche.
Montes, que participó en el 'Encuentro empresarial de la CEV' en Fira Alacant junto a las también conselleras Ruth Merino (Hacienda, Economía y Administración Pública) y Salomé Pradas (Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio) para desgranar sus líneas de actuación, consideró que la aplicación de la tasa era "profundamente injusta", tras cifrar en 3.900 millones de euros los impuestos que ya pagan en la Comunitat Valenciana los turistas cada año. Eso sí, junto a su derogación, que esperó que fuese una realidad antes del 31 de diciembre, Montes avanzó que tomarán medidas (fundamentalmente coercitivas) para evitar actividades molestas o ilegales que deriven en turismofobia.
La consellera señaló que su departamento ya está comunicando a agentes turísticos y turoperadores que finalmente no van a tener que incorporar la tasa turística a los presupuestos de sus paquetes, y de hecho puso en valor la 'no tasa' como atractivo turístico de la Comunitat. En este sentido, señaló que la Generalitat promocionará el destino como 'tax free' en la inminente feria de Londres, la World Travel Market (una de las más importantes del calendario junto a Fitur, en enero), que se celebra el próximo noviembre. Mostrarse a los turoperadores como un territorio libre de tasas (cuando otros muchos en España sí las cobran) será una de las líneas maestras de la promoción que prepara el Consell en Reino Unido.
En general, la consellera de Turismo, que también lo es de Innovación, Industria y Comercio, se mostró partidaria de favorecer la inversión tanto extranjera como local en todas las áreas que gestiona su departamento. Y para ello, defendió no solo actuar sobre la fiscalidad sino también y de forma especial sobre la burocracia. En este sentido, avanzó que "ya tenemos varios grandes proyectos que quieren fijarse en la Comunitat Valenciana", cuyos detalles, aseguró, están sujetos a contratos de confidencialidad. Una de las medidas clave para favorecer la citada inversión será el Plan Simplifica, que busca agilizar los trámites administrativos con medidas como una ventanilla única (que además asesorará a las pymes), la reducción de plazos, el uso de declaraciones responsables o el silencio administrativo positivo.
Por otro lado, en el terreno de la innovación, Montes destacó que la Sociedad de Proyectos para la Transformación Digital (SPTD) volverá a sus orígenes, para centrarse en gestionar principalmente los estudios de cine de Ciudad de la Luz (cuya reapertura para los rodajes logró el Botànic tras haber reconvertido una parte en el Distrito Digital) y "algún proyecto de innovación". En todo caso, la intención es dar un paso atrás en el sector de las economía digital, que era la apuesta fundamental de sus anteriores gestores, para "dejar de hacer la competencia a los coworkings privados". En cuanto a los rodajes, avanzó que este mismo mes se iniciará ya alguna producción.
Por su parte, la consellera de Hacienda, Ruth Merino, dedicó buena parte de su intervención a la elaboración de los presupuestos, además de destacar la bonificación al 99% del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Al respecto, destacó que beneficiará a más de 20.000 personas (entre las 18.000 que lo pagaron en 2022 y las 5.000 que renunciaron a herencias para no hacerlo), y que "dinamizará la economía" al facilitar los relevos en empresas que estaban "parados" por la tributación, y por tanto beneficiará a las arcas públicas. Y en cuanto a los presupuestos, los prometió "rigurosos y responsables", y advirtió de que no incluir "ingresos ficticios" como ha hecho el Botànic ocho años "no significa que renunciemos a reivindicar un cambio en el sistema de financiación".
Por último intervino la consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas, avanzó que el Consell se propone recurrir judicialmente los últimos recortes de 20 a 15 hectómetros cúbicos (hm3.) en los envíos del trasvase Tajo-Segura, al considerar que han sido "injustos" y basados en consideraciones políticas y no técnicas. Pradas defendió que esta será la "legislatura del agua" (se creará una Mesa autonómica) y se comprometió a no frenar el desarrollo con un "proteccionismo mal entendido" como, a su juicio, ha sucedido hasta ahora. Así, va a revisar los Planes de Ordenación (PORN) de los 22 parques naturales valencianos, comenzando por Serra Gelada, y se repensarán también los Planes Territoriales más polémicos, como el de la Vega Baja.