Leopoldo Alvear y César González Bueno, este juevesALICANTE. El fin de la moratoria concursal y de la carencia de los créditos ICO concedidos durante los primeros meses de la pandemia del coronavirus, que coincidieron en el tiempo el pasado mes de junio, hacía temer un incremento importante de las insolvencias empresariales y que, como primer síntoma, se disparase la morosidad. A partir del mes pasado, el 95% de las empresas que recibieron un ICO en junio de 2020 ya están pagando intereses y principal, lo que aumenta la carga financiera en un momento de tensión inflacionista.
Sin embargo, no ha sido así, o al menos aún no ha sucedido. Así lo aseguran los responsables del Banco Sabadell, una de las entidades que más ICO gestionó en aquel momento con 13.900 millones de euros concedidos, de los que se han dispuesto 8.300 millones. Según explicaron este jueves su consejero delegado, César González Bueno, y su director financiero, Leopoldo Alvear, durante la presentación de resultados del semestre, el ratio de mora en los créditos ICO se ha mantenido estable.
"Solo el 3% de los saldos vencidos presentan impagos superiores a los 10 días", indicó Alvear, quien consideró que esta subcartera está teniendo un comportamiento "muy positivo" y destacó que "la mora se mantiene estable en el 6%". A juicio del director financiero del Sabadell, la razón es que la mayoría de los ICO se concedieron a empresas del sector turístico y servicios, las más golpeadas por la crisis sanitaria porque tuvieron que cesar completamente su actividad durante meses, pero que luego "se han recuperado muy bien" y en estos momentos viven un momento dulce.
Por otro lado, los saldos dudosos del banco al margen de los ICO se han reducido un 55% en este trimestre, y la mora general se queda en el 3,31%. La razón es que la entidad con sede en Alicante ha vendido una cartera de préstamos sin garantía valorada en 400 millones de euros, "sin impacto en la cuenta de resultados", según su consejero delegado.
Junto a la contención de la morosidad, el banco puede celebrar que ha culminado con un año de adelanto el plan de eficiencia que puso en marcha González Bueno para reducir los costes de estructura (en oficinas y masa salarial) aprovechando la digitalización de los servicios cada vez mayor. En este sentido, los costes han pasado de suponer el 0,95 del volumen de negocio al 0,8 en dos años. "Hemos alcanzado ya el objetivo marcado para 2023". De hecho, al estar ya completamente aplicado el plan (es decir, ejecutados los cierres y las salidas de personal), se ha generado un ahorro del 1,6% en el trimestre y del 5% en el año, según el CEO.
En cuanto a la posible venta de su filial de medios de pago, González Bueno descartó que la entidad vaya a vender, pero sí admitió que están buscando un socio industrial para potenciar este segmento de negocio. El auge de la tecnología TPV, una forma de pago cada vez más popular en la que el Sabadell tiene una cuota de mercado del 19%, ha llevado a la entidad a buscar un socio internacional que conozca el sector y sea un referente en varios países. "No está en venta, pero estamos explorando la posibilidad de un socio", insistió González Bueno, con el objetivo de impulsar los avances tecnológicos necesarios para mejorar el servicio.
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