ALICANTE. La plataforma líder en distribución de recambios para vehículos eléctricos, GDV Mobility, y Voi Technology, operador de micromovilidad eléctrica compartida líder en Europa, se alían para poner en marcha Circular Wall. Consiste en una macro baterías proveniente de celdas de baterías de patinetes eléctricos usadas, reutilizadas para que se conviertan en un sistema de almacenamiento de energía. En un primer momento logrando un ahorro de más de un 50% en relación con el precio actual de la red eléctrica. Este proyecto, una vez completado, no solo permitirá el ahorro de un 85% de energía, también reduce la generación de CO2 en un 25%. El objetivo es que esta herramienta desempeñe, en una fase posterior, la función de almacenar energía directamente a partir de los paneles fotovoltáicos que la empresa de micromovilidad compartida instalará en el tejado de sus almacenes. Esta segunda fase supondrá un ahorro de suministro eléctrico del 85%.
La planta de reparación de baterías de GDV, en Alicante, considerada la mayor planta de Europa, será el lugar en el que se trabajen las piezas y se produzcan los Circular Wall. Y el primer piloto se pondrá en práctica en los talleres de Voi en Sevilla.
En su compromiso con descarbonizar la movilidad ambas compañías se enfrentan al reciclaje y la reutilización de las baterías de Ion litio que tienen, en el caso de los patinetes, una vida media de unos 2,5 años dado el alto grado de exigencia que tiene Voi. Con el objetivo de reutilizar las baterías para nuevos fines, tras cumplir su ciclo de vida dentro de los patinetes en las calles, Voi se alía con GDV, experta en baterías, para analizar, desmontar y reutilizar las celdas de las baterías estropeadas, reparar los fallos concretos a nivel celdas o conectores, y dar a las celdas una nueva vida con usos menos intensos en potencia puntual, como pueden ser las de hibridación con sistema de producción de energía fotovoltáica. Así, ahorran un 85% de energía, y aseguran que una única batería dure aún otros 8 a 10 años gracias a esta segunda oportunidad integrándose en un Circular Wall.
Voi separa aquellas baterías que han dado fallo y según sus protocolos de seguridad no pueden volver a usarse en otros patinetes y las envía a GDV para que ellos las desmonten a nivel de celda y lleven a cabo un minucioso proceso de análisis. Así, se clasifican las celdas según su eficiencia, de tal manera que se puedan tener conjuntos de celdas que puedan seguir funcionando de forma óptima, en un módulo de almacenamiento complementario. Estos nuevos módulos pueden volver a los almacenes de Voi e integrarse como centros de almacenamiento de energía renovable de tal manera que se pueda optimizar la carga tanto de los patinetes como de los vehículos eléctricos utilizados para las tareas logísticas.
En una segunda fase, Voi instalará paneles fotovoltáicos en sus almacenes para cargar las baterías y los vehículos, pero cuando la producción sea mayor que el consumo, este excedente de producción de energía renovable se almacenará en los paquetes del Circular Wall producidos por GDV.
Tanto GDV como VOI están llevando a cabo este proyecto con procesos, materiales y recursos con los que ya cuentan. Lo que permite también un ahorro importante de costes. Se producen ahorros en materiales que permiten poder invertir en mejores vehículos, y un mejor servicio para las ciudades. "Además de poder reparar las baterias nuestro principal objetivo es conseguir una reducción medioambiental, y eso pasa por conseguir reutilizar el mayor número de celdas, y además pudiendo hacer baterías que cumplan como baterias nuevas sin ningun tipo de problema y con las mismas garantías", asegura Germán Agulló, CEO y cofundador de GDV. El cliente final va a ser consciente de que la energía que mueve el vehículo que está utilizando es la mejor y más limpia posible. Va a poder moverse siendo completamente limpio y sabiendo que su acción de moverse en patinete ayuda a descarbonizar la movilidad y mantener limpio el aire de las ciudades.
El proyecto supone un importante paso adelante en un sector en pleno desarrollo como es el de la micromovilidad eléctrica. "A través de su servicio, Voi Technology ya ha ayudado a evitar unos 370.000 desplazamientos en coche privado en Sevilla y Málaga, ciudades en las que operamos en España, en los últimos dos años. Con ello se han evitado 117 toneladas de emisiones de CO2 y 70 kg de partículas cancerígenas PM 2,5. El mismo resultado habría requerido de la plantación de 2.000 árboles con al menos 10 años de edad en estas ciudades. Una acción que habría requerido un espacio y una inversión enormes. En nombre de la eficiencia, la sostenibilidad y la creación de ciudades hechas para ser vividas por las personas, este proyecto piloto con GDV nos llevará a hacer más ecológico no sólo nuestro servicio, sino también todas las operaciones necesarias para poner el servicio a disposición de los ciudadanos", añade Álvaro Rodríguez, director de Asuntos Públicos para España en Voi Technology.
