El 'marqués de Carrús' levanta pasión en Elche para presentar su biografía: el primer gran exportador de calzado a EEUU

ELCHE. Ataviado con una vistosa y moderna camiseta, como muchos aún le recuerdan de aquellos años de explosión y expansión del calzado ilicitano en los 60s-70s, el empresario Miguel Hernández, más conocido como el 'Marqués de Carrús', llenaba este jueves el Centro de Congresos ilicitano para presentar su autobiografía. Un libro que ha llegado a buen puerto gracias a la colaboración del empresario Joaquín Quiles, de la propia hija del empresario, Marisa Hernández, y del historiador Miguel Ors, que ha estado con la batuta tanto para coordinar el libro como de maestro de ceremonias en la presentación. Un capítulo más de la industria ilicitana, y uno de los más llamativos por la historia del 'marqués', primer gran exportador de calzado a EEUU, también un pionero en el ámbito empresarial por el cierre de la fábrica los viernes a mediodía.

Tras un breve recorrido por la historia de la industria ilicitana, primero de alpargatas, y después de calzado, a cargo de Miguel Ors, tanto él como Joaquín Quiles expusieron los hitos y el espíritu emprendedor de Hernández, quien empezó a levantar su entonces imperio con los ahorros de su madre de 300.000 pesetas. De haber empezado trabajando como cortador, estudiando en las Graduadas y por la noche en la Academia Ripollés, fundó su empresa con diez trabajadores inicialmente y acabó ingresando un millón de euros de la compañía americana Caressa, que se había interesado por su calzado de mujer. Adquirió la mitad de la compañía y el marqués acabó levantando una empresa que empleaba a mil trabajadores. Reflejo de otra época y del fulgor de aquellos años en los que el calzado atraía a migrantes de todo el país.

Unas 400 personas acudieron al Centro de Congresos, entre ellos, algunos extrabajadores de la época, de los que Hernández apuntaba que se encontró hace unos días hablando de los buenos tiempos. Pero tampoco dejaron de asistir caras conocidas del empresariado local como Juan Perán o Rafael Bernabéu, personalidades como Fernando García o Antonio Serrano Bru (quien diseñó su antiguo chalet, hoy Hort de Nal), así como otras caras conocidas y veteranas de la política local como Manuel Ortuño o el exalcalde Diego Macià; también Antonio Rodes, Carlos González, Emilio Martínez...

Nadie quiso perderse la presentación del libro, en la que Hernández, parco en palabras, se deshizo en palabras de elogio ante los asistentes, explicando que quería contar su vida personal, la historia no contada durante sus 30 años de trayectoria con empresario, destacando ese horario hasta los viernes o las condiciones de su fábrica con el aire acondicionado, entre otros detalles. "Lo hice lo mejor que he sabido hacer", decía. Le costó acceder a escribir el libro, pero Quiles, que no sabía cuál era su paradero, dio con él y la única condición fue que Ors se pusiera al mando para la elaboración. Un libro que también narra su particular bajada a los 'infiernos' con el cierre de la fábrica y el declive tras la crisis del petróleo de 1973. Todo ello también resumido en la opinión de hace unos días en este medio de Antonio Zardoya.