Con límite salarial disponible para reforzar el equipo con 'un parado' y también en enero

ALICANTE. El Elche acompañó el lunes el cierre de la ventana de fichajes de verano con cuatro incorporaciones (tres en propiedad y una cesión) que supusieron darle otra tajada al límite salarial pero ni mucho menos lo ha agotado.

El club franjiverde declina por el momento ofrecer datos sobre cuánto margen le resta de los 'más, menos' 31,5 millones de euros de coste máximo autorizado de plantilla deportiva inscribible asignados por la Liga de Fútbol Profesional, pero sí confirma que este le permitiría no solo dar de alta a dos jugadores (son dos la fichas vacantes) en el mercado de invierno, también hacer alguna incorporación ya, fuera de las ventanas de fichajes establecidas, de un futbolista que esté sin contrato ('un parado') de acuerdo con el artículo 124.2 del Reglamento General de la Real Federación Española de Fútbol.

El Elche ha apostado en la ventana estival por futbolistas españoles y argentinos que para eso son de esta nacionalidad el propietario del club y agente, Christian Bragarnik, y el técnico, Jorge Almirón: el portero Diego Matías 'Ruso Rodríguez; el defensa Juan Sánchez Miño; el centrocampista Iván Marcone; y los delanteros Emiliano Rigoni, Guido Carrillo y Lucas Boyé son los jugadores argentinos que han recalado en el club del Martínez Valero en el mercado estival, si bien todos ellos cuentan con pasaporte italiano por lo que tienen la consideración de ciudadanos de la Unión Europea, son trabajadores comunitarios. Los anteriores se unen a las incorporaciones también 'extranjeras' del defensa de origen maliense y pasaporte francés Youssouf Koné y del atacante colombiano Jeison Lucumí (el único que ocupa ficha de extracomunitario) y a los fichajes 'nacionales' de los zagueros Miguel Ángel Garrido 'Cifu' y Alberto Barragán; de los centrocampistas Raúl 'Guti' y Luismi Sánchez; y del delantero 'Tete' Morente. Tan solo sobreviven del equipo del ascenso diez jugadores.

La operación de traspaso más onerosa ha sido, sin duda, la de Raúl Guti (el club franjiverde se ha obligado a pagar al Real Zaragoza hasta cinco millones de euros, aunque de manera aplazada), pero la cesión con opción de compra de Iván Marcone (representado por la agencia de Bargarnik y que protagoniza una operación en la que los actores no se agotan en Elche y Boca Juniors) tampoco debe haber sido barata (sin contar salario) y las otras tres altas del lunes (de futbolistas que tenían contrato en vigor en sus clubes de procedencia) tampoco les deben ir a la zaga. En el otro lado de la balanza de las compra-ventas en las que ha participado el club de la partida de Altzabares quedan el traspaso del lateral Juan Cruz a Osasuna por 2.750.000 euros y la compra de su 'libertad' por parte del también lateral Óscar Gil que dejó 500.000.

'Transfermarkt', el sitio web alemán especializado en fútbol y finanzas, le asigna a la plantilla del Elche un valor de mercado de 35.750.000 euros y la sitúa como la segunda por la cola en Primera División.