ALICANTE. La Cámara de Comercio de Alicante ha escogido a un partner de excepción para poner en marcha la comunidad energética local (CEL) de ámbito provincial 'Toda Alicante', que impulsa junto a la Diputación de Alicante y los ayuntamientos de Alfafara y Salinas (aunque está abierta a los 141 municipios de la provincia) y que podría reducir hasta un 50% la factura de la luz de sus asociados. Al igual que en el caso de la comunidad energética de la Cámara de Navarra, en la que se inspira la alicantina, el socio tecnológico será Edinor, una filial dedicada a las renovables del grupo Repsol.
Según explicaron este martes el presidente de la Cámara de Alicante, Carlos Baño, y el director de su homóloga de Navarra, José Andrés Palacios, la idea es contar con un socio tecnológico de solvencia en el terreno de las comunidades energéticas (Edinor cuenta con un modelo propio, que es el que 'compró' la Cámara navarra) para el lanzamiento del proyecto, que acompañe durante los primeros años, aunque este rol está sujeto a cambios en el futuro si así lo estiman los socios. De momento, Edinor no solo ha puesto en marcha la comunidad 'Toda Energía' en Navarra, sino que trabaja en el desarrollo de modelos similares en el País Vasco o Cantabria, entre otras zonas.
¿Pero quién es Edinor? Energía Distribuida del Norte es una filial del grupo Repsol-Petronor, que dirige como CEO el expresidente del PNV Josu Jon Imaz, especializada en las soluciones de energías renovables y descarbonización. Concretamente, Edinor se ha centrado en el diseño y puesta en marcha de soluciones de energía distribuida y autoconsumo compartido, o lo que es lo mismo, comunidades energéticas. Al frente de Edinor está el presidente de Petronor, Emiliano López. Además, con el apoyo de Petronor y del Gobierno vasco, está trabajando en varios proyectos de I+D relacionados con la movilidad sostenible.
La comunidad energética provincial que impulsan Cámara y Diputación es la primera de estas características que se funda en la Comunitat Valenciana, aunque la Cámara de Castellón está trabajando en su propio proyecto y también la de Valencia se ha interesado por el 'modelo Edinor'. Un modelo que sortea los problemas de la ley de propiedad horizontal que presentan las comunidades energéticas particulares para los comercios y pymes, y que de esta forma se abre a las empresas (además de hogares y administraciones públicas), que es el objetivo de las Cámaras.
Como ha contado este diario, el formato de asociación sin ánimo de lucro por el que se ha optado permite adherirse a comercios y familias sorteando los frenos de la ley de propiedad horizontal, y otorga a cada municipio los beneficios de la agrupación pero manteniendo su independencia de estrategia tecnológica (pueden elegir cuánta energía renovable y de qué tipo instalar) y de política energética (qué criterios primar). La aportación de los consistorios a la comunidad es clave, pues ponen a disposición de la CEL los tejados municipales de edificios, polideportivos, bibliotecas... para instalar las placas que deben surtirla de energía solar. A partir de aquí se pueden sumar tejados privados en régimen de cesión.
Los cambios en la normativa de las comunidades energéticas (antes solo se permitían en un radio de 500 metros, pero ahora se llega hasta los 2.000) facilitan el proyecto, dado que ya no se toma directamente la energía generada, sino que se vuelca a la red y se compensa con la comercializadora. A partir de aquí, además, la CEL pide presupuestos y ofrece a sus miembros los tres mejores para que compren el resto de energía que necesiten. De esta forma, al ahorro de hasta un 30% en la factura que se consigue con la energía propia, se suma el que se consigue con la negociación en grupo del precio de la electricidad que se compra. En total, la rebaja puede llegar hasta el 50%.
Para ser socio se paga una participación de 0,5 kW (suficiente para un hogar medio), y el proyecto cuenta con ayudas europeas de hasta un 60% y una financiación bancaria del 100%, por lo que no es necesario realizar un desembolso inicial. Eso sí, hay cuota de entrada y cuota mensual mientras se sea socio. Los consistorios y comercios pueden reservar varias participaciones de 0,5 kW, desde el momento de la fundación hasta que se resuelven las ayudas europeas para la CEL (cuando hay que ponerla en marcha efectivamente), y en el caso de los polígonos, son los consistorios los que habilitan la llegada de la comunidad energética a las áreas industriales.