Desde su estreno, a comienzos de 1981, Canción triste de Hill Street fue un revulsivo para el género de las series de ficción, acostumbradas a edulcorar la realidad
REM tenían razón. Hasta que dejaron de tenerla. Acuñaron una frase, el título de una de sus canciones más conocidas, que durante años nos ha venido muy bien para tantear cómo de cerca estaba el apocalipsis