SAN VICENTE DEL RASPEIG. Los grupos municipales del PP y Ciudadanos en San Vicente del Raspeig han denunciado -aunque de manera separada- un mismo hecho: un nuevo retraso en la contratación del servicio de limpieza de instalaciones deportivas y la intención del equipo de gobierno (PSOE y EU) de adjudicar este servicio sin concurso. Una acción que pretendía llevarse a cabo modificando el contrato de limpieza de edificios municipales para incluir también las instalaciones deportivas. De esta manera, la misma empresa adjudicataria que presta servicio al resto de edificios municipales lo haría también a las dependencias deportivas, lo que evitaría sacar el servicio a licitación pública.
Esta modificación estaba incluida en el orden del día del pleno que San Vicente celebrará el próximo miércoles 30 de septiembre. Sin embargo, su presentación en la sesión plenaria de este mes se ha visto frustrada tras la retirada del punto por parte del equipo de gobierno. "El motivo que argumentan es un error detectado que ya se dio a conocer en las comisiones, pero nos ha sorprendido que finalmente la empresa no acepte las nuevas condiciones", traslada sus impresiones el portavoz popular, Óscar Lillo.
Desde el gobierno municipal informan que la empresa "aceptaba, desde el primer momento, las condiciones para asumir la limpieza de las instalaciones deportivas". Sin embargo, a menos de una semana del pleno de septiembre, comunicó "no poder asumir este servicio, alegando que les resulta muy difícil asimilar las condiciones de la oferta presentada". Por su parte, Lillo subraya que el servicio vuelve a quedar "en el aire" y se sigue prestando mediante "una prórroga forzosa de la empresa a la que se le adjudicó en su día".
El actual contrato lleva un año caducado -desde el 1 de octubre de 2019-, se encuentra en situación de prórroga forzosa y, desde entonces, han sido varias las ideas que se han intentado llevar a cabo con respecto al mismo: primero se sacó a licitación, pero quedó desierto; después se anunció que se volvería a licitar, pero un mes más tarde entró en juego la posibilidad de municipalizar el servicio.
En este sentido, el concejal de Contratación, Jesús Arenas (PSOE), explica que mientras el Ayuntamiento continúa con los estudios para municipalizar los servicios de limpieza de instalaciones deportivas, se debe continuar prestando. "La fórmula más optima que los técnicos municipales observaron fue la de que la actual empresa adjudicataria de los servicios de limpieza de edificios municipales asumiera este trabajo en las mismas condiciones de la oferta ya adjudicada. Esta medida está contemplada dentro de la legislación vigente, ya que está permitido que los contratos puedan aumentarse hasta un 20% por inclusión de nuevos servicios", argumenta el edil.
El concejal popular Cristian Gil califica como "pésima" la gestión de prestación de servicios por parte del gobierno municipal y lamenta el "avanzado estado de dejadez" de los mismos. "En el tema deportivo puede ser el motivo por el cual no se puedan utilizar las instalaciones al completo, como es el caso de los vestuarios o las duchas", concreta. "Nos llegan quejas de clubs cuyos deportistas se han visto obligados a cambiarse en las gradas o tener que marcharse sin poder utilizar las duchas, teniendo incluso que desplazarse así a sus localidades de origen tras los entrenamientos".
Ante el vaivén del contrato, la edil de Ciudadanos Mariela Torregrosa tilda la situación de "despropósito" e indica que "no sacar a licitación por procedimiento abierto un contrato de estas características va en contra de los intereses del Ayuntamiento, ya que impide a las empresas interesadas presentar sus ofertas, rebajar el coste del contrato o realizar mejoras para prestar un mejor servicio a los vecinos y vecinas de San Vicente del Raspeig".
Asimismo, el grupo municipal de Ciudadanos interpreta la propuesta que el equipo de gobierno pretendía llevar a pleno, pues suponía un importe de casi 62.000 euros más con respecto al precio por el que salió a licitación hace un año, que fue de 204.100 euros. Esto significa que que actual contrato de limpieza de edificios municipales y colegios ascendería a un total de 266.000 euros al año.
Torregrosa afirma que "el equipo de gobierno ha convertido en algo habitual una situación que debería ser extraordinaria, como es que los contratos caduquen por sistema, tanto los más complejos como los más sencillos, y tengan que ser prorrogados mediante un decreto del alcalde, a pesar de existir informes en contra de los técnicos municipales".
Y es que el de limpieza de edificios municipales no es el único contrato que se encuentra en estas condiciones, pues en esta situación también están el de limpieza viaria y recogida de residuos o el de mantenimiento de zonas verdes. "A todos ellos se suma el contrato de mantenimiento químico-sanitario y control microbiológico de las instalaciones deportivas, el cual finalizó el pasado mes de junio sin que se haya adjudicado todavía el nuevo contrato", informa.