Domingo Rodes, en el hotel Imperial de Viena, donde se ha presentado el documental.VIENA. "Dentro de los más de cien documentales que llevo es el proyecto más largo, más complicado, más rompecabezas que he hecho nunca". Así arranca la charla Domingo Rodes. El realizador ha presentado en Viena, La catedral de las seis cuerdas, la mayor producción que haya grabado la Diputación de Alicante.
La capital austríaca tenía que ser donde se lanzara este trabajo que resume la historia de la guitarra española "por la apuesta de la internacionalización que la Diputación hace por la cultura". Así lo cree Carlos Castillo, vicepresidente de este organismo. Con ello se subraya en el extranjero el apoyo que recibe la música en Alicante, así lo cree Castillo, quien no duda en describirlo como "un activo ya que Alicante se precia de ser la cuna de las mejores bandas de España, con más de 300 agrupaciones musicales a través de más de 8.000 músicos".
Presentar el trabajo "en la capital mundial de la música clásica es toda una responsabilidad", retoma Rodes. Entre otras cosas por las intensas sensaciones que le provoca "ver la reacción de un público que está formado y educado en la música desde que nacen". A ellos les ha mostrado los resultados de año y medio de grabaciones con destacados intérpretes como David Russell a los que han llevado a espacios tan impresionantes como la Alhambra de Granada.
Un gran despliegue de medios, pese a que Rodes no llega a cifrar presupuesto final, que empezó siendo un vídeo de producción del Máster de guitarra que se imparte en Alicante. El director recuerda que fue desde el mismo inicio, cuando fueron "conscientes de que había que pasar de lo local en lo global". El listado de intérpretes y las dimensiones de los mismos sirvieron para que creciera el guion hasta hacerlo tan "complejo y ambicioso" como quisieron.
De confirmar que sería un proyecto de grandes dimensiones se encargó el mencionado Russell. Ganador del Grammy en 2005 a la actuación instrumental, querían grabarle aprovechando su paso por el ADDA. Este se negó a hacer si no había un mayor control de la grabación y entonces vieron la oportunidad. Le propusieron grabar Recuerdos de la Alhambra, la composición de Francisco Tárrega, en la propia Granada y este aceptó inmediatamente la propuesta.
Aquello lo describe Rodes como una cascada de oportunidades. Querían a Ignacio Rodes y lo tuvieron, querían contar con los derechos del Concierto de Aranjuez y los consiguieron. Unas gestiones que aún así fueron trabajosas, "el proceso de conseguir todos los derechos de autor de todos los intervinientes es de los más largos que hemos hecho". Si por un lado eran complicaciones, por otro Rodes subraya que "he tenido facilidades para que lo que imaginara saliera en la película".
Lo que imaginaba Rodes era Alicante, convertida en capital de la guitarra española. "Solo hay un instrumento particular de España y es ese", resalta el director. Por eso, su trabajo en el documental era recordar que "la guitarra española va más allá de Andrés Segovia". Así intentó "extrapolar el máster de una ciudad determinada para convertirlo en una historia sobre las seis cuerdas".
Carlos Castillo, gran aficionado a la guitarra, se enorgullece al hablar del trabajo hecho en esta área. "La apuesta que ya hiciera Diputación, Ayuntamiento y Universidad de Alicante en la puesta en marcha del único máster internacional de guitarra clásica ha convertido la ciudad en un referente donde se citan anualmente los mejores virtuosos de la guitarra con alumnos de todo el mundo".
Rodes coincide plenamente con el vicepresidente. "Los mejores profesores del mundo se reúnen en la ermita de San Roque con gente de los cinco continentes y esto lo saben en el mundo", recalca. De eso, apunta, tienen parte de responsabilidad dos personas, José Tomás y José Luis González. Desde Alicante y Alcoy consiguieron en los años ochenta que muchos acudieran a la provincia a estudiarlos. "Una simiente que ha ido creciendo y de la que no podemos imaginar la dimensión que han tenido estos señores. Eso es lo que hemos heredado en Alicante y lo queremos perpetuar".
Han sido muchas las facetas que han ido descubriendo durante el largo trabajo, "el mundo de la guitarra es tan extenso que hemos hecho una hora como estándar televisivo pero se podía hacer mucho más". Ahora Rodes se queda con "la tranquilidad de que la criatura está creada y tiene que moverse por sí misma"
