VALÈNCIA. La distancia entre el hasta ahora síndic de Ciudadanos en Les Corts, Alexis Marí, y el líder nacional de la formación naranja, Albert Rivera, era un hecho. Los movimientos de la eurodiputada de Cs, Carolina Punset -pareja de Marí- para disputarle el liderazgo a Rivera y el viraje liberal de la organización después de la Asamblea General celebrada en febrero habían provocado una fractura insalvable entre ambos.
La protesta contra unos Presupuestos Generales del Estado que sitúan a los valencianos a la cola de las inversiones por habitante y la voluntad del portavoz valenciano de sumarse al acto de este martes en Les Corts desencadenaron la ruptura, pero también ha oficializado el papel que quiere la dirección nacional de Ciudadanos para su delegación en la Comunitat. Rivera se quitaba la careta: prefería una formación valenciana dividida a ir contra de los PGE de Mariano Rajoy. Y con la presencia únicamente de los diputados más afines a Marí en el acto se visualizó la fractura irreparable entre el sector más progresista y el resto de diputados naranjas.
La dirección del partido advirtió al síndic la semana pasada: si acudía a ese encuentro para protestar por los presupuestos para los que el Ejecutivo cuenta con el apoyo de Ciudadanos, sería apartado de la portavocía del grupo naranja en el parlamento valenciano.
Pero Marí lo tenía claro, y sin tapujos lo publicó en su perfil de Twitter: "Mi alma no se vende por 2.200 euros", sentención, en referencia al plus que obtienen los portavoces de los partidos. Si el pasado 5 de abril Ciudadanos -como todos los partidos en Les Corts- firmó una declaración para expresar su "absoluto rechazo" a las inversiones previstas para la Comunitat en los PGE en la que se convocaba, además, a los diputados y senadores el Día de Les Corts, él no iba a retractarse, no acudir al acto y dejar de defender una cuestión que para él es de "justicia" para los valencianos.
De esta manera, este lunes la dirección comunicó su relevo por mantener su intención de protestar contra las cuentas estatales para, decían, "buscar una mayor cohesión en el grupo autonómico y a nivel orgánico de afiliación", en palabras del secretario general del partido, José Manuel Villegas.
Sin embargo, la cohesión no fue tal este martes en Les Corts; más bien lo contrario. El ultimátum de Madrid, precipitaba la fractura del grupo que escenificaba a un Marí apoyado tan solo por tres diputados naranjas. Pese a que en el grupo de los críticos también se encontraban Toni Subiela y Tony Woodward, el aún síndico estuvo respaldado sólo por David de Miguel, el diputado Alberto García, que tras el acto de este martes confirmaba a Valencia Plaza que tenía "dos pies fuera" de Cs, y Domingo Rojo.
El resto de diputados del grupo parlamentario no se dejaron ver -pese a que también secundaron la declaración institucional a principios de abril- por no romper con las directrices marcadas por Madrid. Sí que acudieron, sin embargo, al acto de celebración del Día de Les Corts. Entre ellos, la que será la nueva portavoz del grupo, Mari Carmen Sánchez, que tras asegurar que esperaba que se continuara trabajando "juntos desde la unidad", quiere que se haga "borrón y cuenta nueva".
Su ausencia en el acto para pedir una mejor financiación la justificó alegando que creía que con la convocatoria se había intentado hacer "un uso partidista o nacionalista". Y, aunque sí dijo que los presupuestos le parecían "mejorables" y admitía estar de acuerdo con lo que firmó, no quiso valorar las palabras que Marí dirigió a Rivera sobre si había "tomado una sobredosis de Cola Cao" el día que planteó que quien no estuviera de acuerdo con cuestiones del partido, abandonara la formación.
De la misma manera, tampoco aclaró el portavoz autonómico de Ciudadanos en la Comunitat, Fernando Giner, si los diputados valencianos naranjas en el Congreso presentarán enmiendas a los PGE o darán por buenas unas cuentas que no agradan en la delegación valenciana.
A pesar de esta visible división, Marí no piensa abandonar Ciudadanos. Tras el acto de protesta contra la "marginación" de los valencianos en los PGE, aclaró que hablaría con los compañeros "que algunos califican de díscolos pero que han acudido todos los santos días a Les Corts a trabajar, mientras que otros estaban en otro sitio". Asimismo, tampoco entra en los planes, al menos de momento, de David De Miguel, Alberto García y Domingo Rojo emigrar al Grupo de No Adscritos.