ALICANTE. El presidente de LaLiga Javier Tebas se mostraba este lunes partidario de que las conversaciones entre el árbitro principal y su colega en el videoarbitraje sean públicas de alguna manera e incluso puedan formar parte de la retransmisión de los partidos.
"Aunque sea una emisión retrasada, sí soy partidario. Volveremos a pedirlo. También pedimos que al final del partido un árbitro dedique un minuto a los comentaristas. Depende de (Luis) Medina Cantalejo (presidente del Comité Técnico de Árbitros) y de la Federación Española de Fútbol", decía Tebas en el transcurso de una entrevista en Movistar +.
En la Primeira Liga portuguesa, la Ligue 1 francesa, la Seria A italiana o la Premier League inglesa lo anterior ya es una realidad, de una u otra forma y en período de pruebas o de manera definitiva.
En España el sistema de 'Video Assistant Referee' o VAR funciona desde la temporada 2018/19 en LaLiga EA Sports y desde la 2019/20 en LaLiga Hypermotion. Aquel se compone de diferentes elementos y actores: por un lado tenemos las cámaras (seis, por lo general) y la unidad de procesamiento instalada en cada estadio que sirviéndose de la unidad móvil de televisión desplazada para retransmitir el choque envían la imagen y sonido del mismo a Las Rozas, a la 'Video Operation Room' o VOR central donde un técnico de imagen y sonido se encarga de ofrecerle la mejor toma el árbitro VAR y a su asistente o AVAR. Estos, a su vez, se comunican con el árbitro principal cuando se trata aquellos lances del juego y decisiones arbitrales en las que se contempla su intervención y que no son otros que los goles, penaltis, expulsiones y situaciones de confusión de identidad. Unas veces el árbitro principal ve refrendada su decisión por su colega en Las Rozas, otras se desdice invitado por él y otras resuelve en un sentido u otro tras ver la acción de que se trata en un monitor situado junto a la entrada del túnel de vestuarios de cada estadio.
Son las conversaciones entre el árbitro principal y el árbitro VAR las que LaLiga ha tratado ya en al menos una ocasión que tanto el Comité Técnico de Árbitros como la Federación consientan que sean públicas, pero ha recibido una respuesta negativa.