Planagumà, de rozar el ascenso a la destitución

16/09/2019 - 

ALICANTE. El entrenador del Hércules, Lluís Planagumà, ha pasado en apenas tres meses de rozar el ascenso e ilusionar a la afición a estar muy cuestionado por la grada y una cúpula directiva de la entidad que finalmente decidía su destitución la mañana del lunes.

Tras la derrota de este domingo ante el Sabadell (0-2), los propietarios del Hércules aparentemente dieron un voto de confianza al entrenador, por lo menos hasta el partido de la próxima jornada ante el Orihuela, pero otras fuentes de la entidad se apresuraban a deslizar a Efe, a primera hora de la mañana de este lunes, que su continuidad no estaba garantizada.

El preparador catalán llegó al club alicantino el pasado año tras una de las peores temporadas del club en Segunda B y desde el primer momento logró conectar con el vestuario y la grada y firmó el mejor arranque de la historia del Hércules en la categoría tras ganar los cuatro primeros partidos y encaramarse al liderato.

El equipo, tras varios años de decepciones, logró reconquistar la confianza de sus aficionados con un juego sólido que se basó, sobre todo, en la seguridad defensiva y en el rigor táctico.

El técnico, además, se ganó la simpatía de su hinchada con un discurso de exigencia para el equipo y el club, pero también motivador para los aficionados, que desbordaron su entusiasmo tras la clasificación del equipo, después de dos años de sequía, para la fase de ascenso.

El Hércules, que logró llenar el estadio nueve años después, superó las dos primeras rondas en medio de un ambiente de euforia, pero no logró finalmente el ascenso tras caer claramente ante la Ponferradina en la ronda decisiva.

La derrota en El Toralín dejó entrever la marcha del entrenador, quien dijo que se había fallado en el objetivo y que se necesitan nuevas energías para liderar el siguiente proyecto.

Por entonces ya eran evidentes las discrepancias entre Javier Portillo, director deportivo, y el preparador catalán, lo que motivó que el madrileño buscara incluso relevo para el banquillo.

Sin embargo, los máximos accionistas de la entidad apostaron por dar continuidad a Planagumà, que finalmente renovó por un año, aunque la herida sufrida en la promoción no cicatrizó, sobre todo para una parte de la afición, que reclamaba un cambio.

Tras algunos roces con el director deportivo en la planificación deportiva, tanto en el capítulo de altas como en el de bajas, Planagumà es la víctima de una nefasta racha de un punto de doce posibles, la peor marca inicial del equipo en diecisiete años en Segunda B.

Por primera vez desde su llegada, la grada pidió su destitución durante buena parte del encuentro de este domingo ante el Sabadell (0-2).

El técnico dijo en la sala de prensa que se sentía con fuerzas para revertir la situación, aunque también reconoció que una racha de un punto de doce es demasiado dura para un equipo con las aspiraciones del Hércules, cuyos objetivos eran el ascenso y el campeonato de grupo.

Noticias relacionadas

next
x