MADRID (EFE). Un estudio sobre la venta de entradas online en 50 páginas web oficiales de cines, teatros, museos, conciertos, festivales, exposiciones, espectáculos y clubs de fútbol realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) revela que, salvo en el caso de los museos, es habitual el cobro de gastos de gestión, a veces oculto bajo el concepto de tasas.
La organización considera que el cobro de gastos de gestión no está justificado, ya que es el propio usuario, no el vendedor, el que asume el peso de la gestión de la compra de una entrada por internet: es él quien teclea o selecciona la fecha, el tipo y número de entradas, además del método de pago, para lo cual debe introducir sus datos personales. De hecho, al tratarse de páginas web oficiales, la compra se hace directamente con la empresa que organiza el evento, no a través de una empresa intermediaria. Es más, la opción de compra online libera tiempo de trabajo en la taquilla física, al tiempo que reduce la espera en la taquilla a otros usuarios.
Únicamente los servicios adicionales a la propia compra de la entrada podrían justificar un recargo, considera OCU. Por ejemplo, un aviso personalizado en caso de cancelación del evento asociado a la gestión posterior del posible reembolso, o bien el envío de las entradas hasta el mismo domicilio del comprador. Servicios que deberían ser en todo caso opcionales, no obligatorios.
Además, la organización denuncia que el cobro de los gastos de gestión suele estar oculto hasta el mismo momento en que el usuario va a realizar el pago, incrementando inesperadamente el precio anunciado, que el estudio cifra en de 3 euros de media por entrada, lo que representa un 7% del precio final. Los mayores sobrecostes se dan en los conciertos y festivales de música, donde suma 5,4 euros de media, el 10% del precio final. Pero es que encima estos recargos se aplican por cada entrada individual que finalmente se adquiera, no por la operación de compra, que es única, multiplicando así su coste en función del número de entradas que finalmente se adquieran.
OCU lamenta que el Ministerio de Consumo no los considere abusivos. Pero considera que un tribunal sí podría considerarlos de este modo, al menos cuando son webs oficiales, por lo que recomienda a los afectados reclamar.
Las páginas web de reventa sí pueden aplicar gastos de gestión, ya que actúan como intermediarios, pero deberían incluirse desde un inicio y aplicarse por gestión, no por entrada. En su caso el mayor abuso procede del excesivo recargo online de dichos gastos, por lo que OCU insiste al Ministerio de Consumo para que impulse una normativa que limite su recargo al 20%, tal y como recoge la normativa para la reventa de entradas en la taquilla.