Hoy es 18 de noviembre

pleno específico en torno a la situación de la ciudad

La tránsfuga se reivindica ante el primer debate político sobre el estado de Alicante

La concejal expulsada del tripartito por adjudicar contratos menores a afines sostiene que mantiene su fidelidad al pacto de gobierno en el 82% de las votaciones 

14/10/2016 - 

ALICANTE. La exconcejal de Vivienda y Acción Social y hoy edil no adscrita, Nerea Belmonte,  expulsada de las filas de Guanyar por falta de confianza tras la adjudicación directa de contratos menores por un importe de 17.000 euros a colaboradores afines, puede convertirse este viernes en una de las principales protagonistas del primer debate plenario sobre el estado de la ciudad de Alicante, que arranca a las 9:30 horas. Ella es, como enfatizó el alcalde, Gabriel Echávarri (PSOE), en una entrevista concedida a Alicante Plaza, quien tiene la capacidad de decantar la balanza a favor del equipo de Gobierno o de la oposición en la mayoría de las votaciones, ya que, desde el mes de marzo, su postura es la que puede deshacer el empate a 14 que podría esperarse en la mayor parte de los debates entre PSOE, Guanyar y Compromís, por un lado, y PP, Ciudadanos (C's) y el exedil de esta última formación, Fernando Sepulcre (como Belmonte, ahora también concejal no adscrito), por el otro.

Los representantes del tripartito inciden una y otra vez en público en reclamar su renuncia al acta de concejal (el camino que, por ejemplo, ha emprendido el ya exportavoz de C's, José Luis Cifuentes) y no desaprovechan la oportunidad, durante sus turnos de intervención en los plenos, para recordarle que es ella quien, a su juicio, ha truncado la voluntad de los ciudadanos manifestada a través de las urnas el 24 de mayo de 2015: que Alicante tuviese un gobierno progresista tras 20 años de mandatos consecutivos del PP.

Ella, sin embargo, niega la mayor. En declaraciones a este diario, la edil tránsfuga ("persona que con un cargo público no abandona este al separarse del partido que lo presentó como candidato", según la definición oficial de la Real Academia Española la Lengua) sostiene que en la mayor parte de los debates sigue manteniéndose fiel a los planteamientos ideológicos recogidos en el acuerdo de gobernabilidad. Es más, sostiene que así lo certifica el seguimiento que ella misma está elaborando sobre el sentido de su voto en todos los plenos celebrados a partir del mes de marzo. Según sus estadísticas, en 106 votaciones planteadas (propuestas de acuerdo, mociones y declaraciones institucionales), ha votado en 87 ocasiones junto a sus excompañeros del tripartito (el 82,16%) y en otros seis puntos, habría apoyado a alguno de los partidos que lo componen (el 5,6%). Siempre según su recuento, elaborado a partir de las actas cada sesión plenaria, sólo habría votado junto a la oposición en otras seis oportunidades (el 5,6%) y en otras seis se habría abstenido. 

Alicante Plaza sólo ha podido contrastar 74 votaciones junto al tripartito y cinco en contra hasta el pleno de julio (en agosto no hubo y la de septiembre todavía no está publicada en la web municipal). Quizá, la posición contraria más significativa fue su voto contra la extensión de la libertad horaria para los comercios a toda la ciudad, en la que Belmonte se posicionó con el PP frente a la propuesta presentada por el alcalde. Pero en aquella ocasión, su voto no fue determinante, ya que también rechazaron la iniciativa Guanyar y Compromís.

Sea como fuere, Belmonte insiste en que ella no es la "muleta del PP ni de C's; yo tengo criterio propio que, por mi ideología y mi respeto al pacto de gobierno que apoyé, coincide en muchos aspectos con el del tripartito, pero obviamente si hace algo mal lo denunciaré". Siempre, apostilla, sin ánimo de bloquear la gestión del tripartito. Sostiene que su posición es votar "en función de lo que considero que es mejor para la ciudad" e insta a PSOE, Guanyar y Compromís a dialogar con la oposición, que es lo que debe suceder "cuando un gobierno está en minoría". 

En esta línea, deja claro que lo que por ahora no está en su horizonte es dimitir, ya que considera que no ha hecho "nada ilegal". Asegura, además, que su presencia en la candidatura de Guanyar Alacant (EU más una plataforma ciudadana encabezada por Podemos, del que ella procede) "fue a título personal, no en nombre de Podemos". "Por eso ni la gestora de Podemos Alicante ni ningún órgano del partido tenían derecho a reclamar mi acta", defiende. Es más, mantiene que sigue siendo militante de Podemos mientras la Comisión de Garantías Democráticas estatal resuelva el recurso que ella presentó contra el acuerdo de su expulsión.

El desarrollo de la sesión

Belmonte volverá a ser blanco de las críticas de sus excompañeros de gobierno en el debate de este viernes, al que el tripartito llega en situación de minoría, precisamente, a causa de su expulsión. En la sesión se abordará, fundamentalmente, el proyecto político desarrollado por el tripartito en sus primeros 15 meses de gestión. Los portavoces de todos los grupos políticos pactaron la semana pasada que el encargado de abrir la sesión sería el alcalde, Gabriel Echávarri, con una intervención de 15 minutos, y que, tras él, tendrían el turno de la palabra los líderes de los cinco partidos con representación municipal (PSPV, Guanyar y Compromís, en el gobierno; PP y C's, en la oposición), y los dos ediles tránsfugas Belmonte y Sepulcre. Echávarri es también el encargado de cerrar un pleno en el que no habrá propuestas de resolución. Su probable inclusión se abordará en el próximo debate sobre el estado de la ciudad, en 2017. En la sesión de este viernes, el tripartito hará repaso de sus logros (entre otros, la obtención de 11 millones en fondos europeos para llevar a cabo la reurbanización del entorno de los dos castillos: San Fernando y Santa Bárbara) hasta la fecha y marcará cuál es su hoja de ruta a partir de ahora. La oposición afeará lo que considera su falta de gestión en asuntos como el retraso del Plan General o la concesión de licencias.          

Noticias relacionadas

next
x