Última parte del alzado del muro de la mota del río en Almoradí. Foto: APALMORADÍ. Siete meses después de que cayera el muro del cauce del río Segura a la altura del término municipal de Almoradí debido a la DANA de septiembre, la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha finalizado el alzado del nuevo muro de hormigón.
El muro tiene una altura de siete metros y una longitud de 96. Para su construcción se han ejecutado ocho paños de doce metros cada uno y se han empleado 800 metros cúbicos de hormigón y 53.000 kg de acero para armadura. En cuanto al espesor del muro es de 65 centímetros y la anchura de las zapatas de 6,35.
La borrasca Gloria en enero y las constantes lluvias de marzo concentradas en unos pocos días han impedido que una de las fases más delicadas de los trabajos concluyan en el tiempo previsto.
Durante la primera semana de febrero se iniciarion los trabajos de refuerzo que precisaba la cimentación de los muros que hoy han concluido. Un informe de la CHS estipulaba en tres semenas aproximadamente la duración de los trabajos. Las lluvias en la penúltima semana de marzo, principalmente el 24 y 25, en la que según MeteOrihuela, se registraron 100 l/m2 acumulados en Orihuela, impidieron que los operarios continuaran con el trabajo en las zapatas para el encofrado.
El nivel del agua a su paso por el término municipal de Almoradí superó los 2,6 metros lo que provocó en un primer momento que quedara bajo las aguas las zapatas y además se produjeron filtraciones en la mota, lo que obligó al desalojo de varios vecinos. La CHS aseguró que esas filtraciones no suponían ninguna alarma.
Una semana estuvo paralizada la obra hasta que bajara el nivel del agua y se secara la tierra lo necesario para que la maquinaria continuara con los trabajos. Estos se retomaron el 1 de abril, y su cometido se centraban en la limpieza de las zapatas para así iniciar el encofrado y hormigonado, cuyos primeros metros quedaron fijados el 6 de abril.
El presupuesto estimado para los trabajos de taponamiento y reconstrucción del muro asciende a unos tres millones de euros.
Una vez que han finalizado las obras de alzado del muro, el siguiente paso y uno de los últimos es el rellenado del trasdós del muro mediante gravas y geotextil. La función es la de garantizar el adecuado drenaje del mismo. Esto, según los cálculos de la CHS, conllevará entre dos o tres semanas. La previsión del organismo desde un primer momento era la finalización de toda la obra a lo largo de abril, pero las lluvias y los parones a los que se han visto obligados, demorará a las primeras semanas de mayo.
