Felipe VI. El ninot del Rey se quemará. Y quizás no habrá ninguna Fallera Mayor de València plorant com una magdalena. Probablemente tampoco estará Santiago Abascal cantando “Soy el novio de la muerte”. Pero seguro que habrá millones de niños y adolescentes anti cambio climático gritando en la antorcha del oceáno hasta la afonía “Todos somos Greta Thunberg”. Será una noche serena, fantástica llena de luz pompeyana y si no se ha muerto Manuel Vicent -esperemos que no- se sentará bajo su olivo milenario, abrirá en dos el pan y le ofrecerá al mediterráneo tres sardinas consagradas. Comerá cuatro olivas. Cinco táperas y medio tomate después brindará por la república. Mañana sabremos si Ximo Puig le da el berrinche de superenamorado a Mónica Oltra y adelanta las autonómicas. Como habrán visto en la encuesta que publicamos el Grupo Plaza, las fuerzas del eje izquierda derecha se reeequilibran. Pase lo que pase y digan lo que digan los alcaldes, la suerte está echada. La legislatura está guillotinada. Hagamos la autopsia. Estoy de acuerdo con @monicaoltra que todo tiene que tener razones políticas. Claro que, con perdón, senyora vicepresidenta, el primer objetivo político es siempre, obviamente, ganar las elecciones. Hermes Trimesgistro: “el sabio puede emplear las leyes del plano superior para dominar al inferior”. Love Story.
De entrada un servidor el otro día cogió un berrinche -ríete tú de Ana Pastor, la Mare de Déu del Miracle de la Llàgrima en la despedida del Congreso de los Diputados- viendo en À Punt la crida de les Falles de Sant Josep. Me dio un subidón y ataque de autoestima que para quitarme la ansiedad me tragué a palo seco tres botellas de Jacks Daniel’s, podé toda la Rambla y adyacentes y me zampé dos bocadillos de faves amb blanc i negre que ni en su día se los saltaba la silenciada -casi tabú pop ulular- Rita Barberá. Conjuré al ejército de travestís sin complejos ni compasión del mundo mundial. Y empecé a prepararme, los bocadillos, los lexatines y la ginebra para el trompellot del meu home, junto con el carrito per al nadó y el ajuar para desfilar como Ximo Bayo en l’ofrena…..!!!!!!...Arrrrgggggg….no encuentro el espolín...!!!!!!!!!!. El cap i casal en pleno éxtasis. Ja vorem les purgacions.
A todo esto en Madrid la cosa está si los debates electorales son a 5 o a 2. Ave María ¿cuándo serás mía? Cristina Cifuentes se va. Y hay un juicio —como todos, injusto—. Aunque el mejor, como siempre, Mariano Rajoy. El más señor y preciso: Íñigo Urkullu. El más sinvergüenza, Juan Ignacio Zoido, que descargó sus responsabilidades en los bocatas de mortadela del Piolín. El mejor de la semana, con permiso de Paco Camps y Toni Cantó —José Corbacho y Felipe Bauzá nasíos pa’ matar— ha sido, con diferencia, Álvaro Pérez, El Bigotes. Xabier Arzalluz ha muerto. La patria de los jesuitas vascos lo acogerá en su seno. Les mascletaes espectaculares.
Aunque grandiosa como una diosa, magnífica como una vasija de Exequias, perfecta e impactante como un himno bestia, hipnótico y sublime del maestro y leyenda del rock Salvador Domínguez… y espléndida como las figuras de Fidias y desconcertante como el mejor David Bowie…fue la celestial aparición de SM Letizia Ortiz en el inauguración de ARCOmadrid19. Glass Hair, con coleta baja y con un lazo y un mechón suelto al estilo nobleza Maria Antonieta —joder, qué placer leer a Pilar Pedraza en Valencia Plaza— lució un kimono negro corte midi con aberturas laterales y cinturón a juego de la marca And Other Stories -349 euros- combinado con unos salones de tacones beige y un bolso baguette con tachuelas. Divina de la muerte. Royal Punk. El rey, con traje gris a rayas con corbata rosa. Monseñor Cañizares –con su capaaaaaaaaa levitante de angelitos, sus zapatos y ropa interior a medida, va mejor, muchísimo, infinitamente vestido, y no digamos Juan Cotino, que el monarca. Es que tienen quien les quiere.
En les Corts Valencianes hubo fiesta fin de curso con selfies —sonrisas y lágrimas—. Y muchos besos y una flor: Mireia Mollà. La Dama d’Elx que —qué putada, le ha estrangulado el adelanto de las generales— se auto-exila, se entierra en vida junto al cadáver de su padre Pasqual en la loma de l’Alcúdia vestida de Gala en las tierras de Manuel Campello Esclápez. Todo Alicante anda preocupado búscandole algo a Manuel Alcaraz —un no se qué que roer, una mina qué explotar, otro urinario de Marcel Duchamp— para que se entretenga. Quizás podría nombrarle la Autoridad Competente “El Papa de los Catedráticos y Opinadores Asesinos a Sueldo”, Presidente de la Semana Santa Provincial o de les Fogueres de Sant Joan ahora que Manuel Jiménez va a dejar de no hacer nada en la Diputación para presentarse en la lista del —qué guapo— legionario y alcaldísimo Luis Barcala. Que ha tenido el cuajo de censurar el cartel del Carnaval Alicante 2019 en el que Franco —como XMen— fulmina la verdad con los rayos de los ojos. Barcala y Mari Carmen de España están compitiendo a cuerno partido para robarle el Premio Nobel a Francis Mojica. El hijo —la niebla sobre el skyline de Benidorm— de Pedro Zaragoza se sitúa a la izquierda de César Sánchez. Que ya no se corta en ni en publico ni el Sorell de ser el aceite y agua bendita con Isabel Bonig. Crimen y Castigo. Yaneth Giraldo, la familia pobre de Ciudadanos, se conforma de quedarse de telefonista. El señor Pepe de Lucía, padre de Malú, ya ha conocido a Albert Rivera. Eva Ortiz, la Chica Bond, se mete con Manolo Mata y éste le amenaza con contar cosas de su padre. Pepe Císcar y ella le plantan cara a Pablo Casado contra Emilio Bascacuñana. Un tío se dedica a hacerse pajas, Se equivoca de línea. Y de autobús: Hazte oir Hitler. Tres padres nuestros y una salve.
Tamara Falcó ya ha ido dos veces a misa con su novio. Pero todavía no se han besado. Paco Roig y Vicente Boluda suman más fuerza y empresarios a AVE: entre ellos a Josep Oliu del Banco de Sabadell. El único capaz de solucionar la crisis de la naranja se llama Roger Llanes. La UA premia a la investigadora médico Rosa Ballester Añón. La persona más eficiente, seria, rigurosa y cariñosa con la que he tendo el placer de trabajar. La semana que viene es la de las mujeres. Gonzalo Eulogio es mi amigo. El más lúcido de mi generación. Hablamos por teléfono -nos tenemos alergia- no sólo de cine, arte y cultura. Más de cuarenta minutos. Antes de colgar me suelta: Alicante se precipita, como Willem Dafoe en el papel de Van Gogh, hacia la autodestrucción. Me da una punzada en el corazón y siento que le quiero. Desnudos a la intemperie de la verdad hablamos María Marco Such y la artista Mariadolores Mulá Hernández. Me regalan su cariño. Y un tesoro. Carlos Castillo pretende robarnos a Riquelme. Que es de todos los alicantinos. Lady Gaga enamorada de Bracey Cooper. Irina Shayk hace un Pataky, enseña la espalda. La dentadura. Y se dispone a merendar. Hay un señor muy de derechas que se ha tragado a Miguel Bosé. Los socialistas son unos cachondos. Nos hacen votar a un astronauta: Pedro Duque. Y a un teatrero: Paco Sanguino.
La luz del Nobska Lightouse Woods Hole y Falmouth nos adormece entre el viento que rompe las cañas y el mar helado desde Marta’s Vineyard. Noche dura, en la costa de Massachusetts. Noche de pijamas. Las niñas han caído excitadas hace exactamente veintrés minutos. Arcely Savin viene con café desde la cabaña: es la hora chicos. Se enciende un porro como la Estatua de la Libertad. Calados, llegamos a la British Beer Company. El viejo Andrew Cooper nos sirve cinco Bloodys Marys. Suzy-Anne me suelta es para ti: desde España. Mi nunca bien ponderadio ni ni pagado Herr Direktor Miquel González me suelta: es lo mejor que haces desde años. Date por despedido. Volvemos al faro y las niñas están bañándose entre los patos y los cormoranes en el mar. Acabaremos en el hospital. Es igual, mañana saltamos a la costa oeste: a Eureka. La mejor marihuana del mundo, lo cura todo. Suenan las cuatro y media en el campanario de mi pueblo. La Vall de Almonacid, Castellón.