ALICANTE. Ikea suma y sigue en su proceso de expansión en España con el anuncio de una nueva apertura en Almería sin que se despeje su posible implantación en Alicante, que todavía sigue abierta a "escuchar y conocer las propuestas que el Ayuntamiento tenga en este sentido", según apuntaron a Alicante Plaza fuentes de la compañía este miércoles.
Por partes. La multinacional del mueble hizo públicos los detalles de ese nuevo proyecto en otra provincia del arco mediterráneo, en el que se prevé una inversión de 65 millones de euros. Las obras deben estar finalizadas antes de tres años para que la tienda pueda inaugurarse en 2020, tras haber creado hasta 300 puestos de trabajo directos y otros 500 indirectos, según la información difundida por la compañía.
Ese nuevo centro, con una superficie de 20.000 metros cuadrados, será el cuarto de la compañía en Andalucía y el decimoséptimo en el conjunto del territorio nacional, tras los ubicados en Alcorcón, San Sebastián de los Reyes, Ensanche de Vallecas (Madrid), Badalona, L'Hospitalet de Llobregat y Sabadell (Barcelona), Castilleja de la Cuesta (Sevilla), Málaga, Jerez (Cádiz), Barakaldo (Bizkaia), Pola de Siero (Asturias), Murcia, Zaragoza, A Coruña y Arroyo de la Encomienda (Valladolid) y Alfafar (Valencia).
Además, cuenta con un Punto de Entrega en Navarra y dos centros de distribución en Valls (Tarragona), que suministran productos a las tiendas de la compañía en el suroeste de Europa y que constituyen la base logística para la expansión de IKEA en la Península, y los centros comerciales Luz Shopping y RIO Shopping en Jerez de la Frontera y Valladolid, respectivamente, según fuentes de Ikea.
La de Alfafar sigue siendo hasta ahora su única incursión en la Comunitat, 15 años después de que la multinacional comenzase a explorar posibilidades para asentarse en la ciudad de Alicante. En ese momento (año 2002), el emplazamiento que se llegó a barajar fue el del PAU 1. Después, se optó por trasladar la propuesta hasta los terrenos del antiguo Plan Rabasa tras convertir el proyecto residencial original en una Actuación Territorial Estratégica (ATE) que preveía un macrocentro comercial junto a la tienda de muebles, de la mano del promotor Enrique Ortiz.
Con el desestimiento de la sociedad Alicante Avanza a impulsar esa ATE, oficializado el pasado mes de septiembre, Ikea se habría desligado del controvertido empresario, procesado por los casos Gürtel y Brugal. Pero, desde entonces, no ha habido ningún avance definitivo que garantice su llegada a la capital, al margen de un anteproyecto de menores dimensiones en el que se aspiraba a instalar una tienda y hasta cuatro medianas superficies también en Rabasa, en la franja de suelo paralela a la Avenida de la Universidad (cuya titularidad corresponde a pequeños propietarios).
El gigante sueco nunca llegó a confirmar oficialmente su implicación en ese anteproyecto y no ha vuelto a pronunciarse sobre sus perspectivas de aterrizaje en Alicante hasta que, en abril, comunicase la suspensión de una reunión prevista con una delegación del tripartito encabezada por el vicealcalde y concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón (Guanyar); el portavoz del equipo de Gobierno y segundo teniente de alcalde, Natxo Bellido (Compromís); y la portavoz del PSOE y tercera teniente de alcalde, Eva Montesinos. El alcalde, Gabriel Echávarri, había renunciado a participar en esa cita tras argumentar que no iba a ser con el máximo responsable del departamento de Expansión de Ikea.
La compañía insiste en que seguirá estudiando "diversos emplazamientos" para la implantación de su "proyecto conjunto de tienda con centro comercial"
Al comunicar la anulación de esa cita, la multinacional emplazó a los representantes del equipo de Gobierno de Alicante a acordar una postura en común sobre su propuesta y manifestó su intención de buscar otros posibles emplazamientos en otros puntos de la provincia para poder desarrollar su proyecto de tienda con centro comercial.
Fuentes de la compañía precisaron este miércoles que esa sigue siendo la hoja de ruta en vigor. "Desde Ikea Ibérica mostramos nuestra clara y firme apuesta por estar en Alicante, por lo que seguiremos estudiando diversos emplazamientos en la provincia para la implantación del mismo proyecto conjunto de tienda con centro comercial y estamos también dispuestos a escuchar y conocer las propuestas que el Ayuntamiento tenga en este sentido", apuntaron.
En esta línea, añadieron que "desde 2002 Ikea ha intentado instalar la que sería su segunda tienda en la Comunidad Valenciana, tras la apertura de su tienda de Ikea Valencia Alfafar a mediados de 2014 y por diversos motivos no ha sido posible. Creemos que esto solo supone un perjuicio para los alicantinos que deben trasladarse a las tiendas de Murcia y Valencia para acceder a una tienda Ikea".
Desde la suspensión del encuentro previsto para abril, ningún representante del equipo de Gobierno se ha vuelto a manifestar sobre gestos encaminados a retomar los contactos, más allá de la comisión de Ikea, en la que se emplazó a los grupos de la oposición a fijar sus preferencias sobre el proyecto. Tras esa comisión, el tripartito trasladó a la opinión pública que no daba por perdida la implantación de la compañía, que volvería a solicitar un encuentro con sus responsables y que les comunicarían su predisposición a negociar su llegada con un proyecto de una superficie máxima de 80.000 metros, en los que se incluiría su tienda. Eso sí, antes ya se había llegado a insinuar que habrían otros inversores interesados en invertir en Alicante si Ikea desistía de sus planes. Tampoco ha trascendido nada más sobre la identidad de esos posibles inversores.