MADRID. Una buena actuación en un Europeo sub-21 es, casi siempre, sinónimo de fichaje por un grande del viejo continente. El Real Madrid 'pescó' a Isco Alarcón en 2013 y a Dani Ceballos en 2017; Thiago Alcántara pasó del Barcelona al Bayern Múnich también en 2013; y el último campeonato, que ganó España, puso en el escaparate a Fabián Ruiz y Dani Olmo, ahora fijos en la absoluta. Gonzalo Villar ha empezado reivindicándose.
O mostrándose, como él mismo reconoció en la rueda de prensa posterior a la victoria frente a Eslovenia (0-3) en un partido en el que fue elegido el mejor jugador (MVP).
"A día de hoy hay mucha gente en España que no me ha visto jugar un solo partido. Sabía que es una buena oportunidad para demostrar la confianza con la que estoy jugando este año. Cuando juegas en otros países no se ve tanto y era una buena oportunidad", comentó.
Y es que Gonzalo Villar sorprendió con una valiente decisión en enero de 2020. Dejó el Elche, en Segunda División, para marcharse al Roma a crecer como futbolista en la élite. Dos meses más tarde, la pandemia del coronavirus azotó Europa y se le hizo difícil, pero se repuso y tras la vuelta del fútbol dio muestras de su calidad, especialmente con una gran actuación frente al Juventus a final de la pasada temporada.
Tras esta, habló con Efe y advirtió que se veía preparado para tener un papel más importante en el Roma: "Estoy preparado para tener un rol mayor en el equipo, tengo que seguir ganándomelo en cada entrenamiento y cada oportunidad que me dé (el entrenador); pero sí que estoy preparado para entrar muchas más veces y tener muchos más minutos que la temporada pasada", comentó el pasado 2 de septiembre.
Dicho y hecho. Esta temporada es un fijo para Paulo Fonseca y está maravillando a Italia, donde destacan su descaro y personalidad sobre el terreno de juego. Nivel que ha trasladado a la selección española sub-21, además en una posición clave para el juego que propone Luis de la Fuente, la del ‘8’, aunque el murciano lleve el ‘10’ a la espalda.
MVP contra Eslovenia por mucho más que su gol, que lo firmó con un gran disparo con la diestra colocando el exterior del pie para que el balón entrase pegado al palo; definición de muchos quilates. 86% de acierto en el pase (63/73), tres pases clave, 100% de efectividad en los tres regates que intentó y se llevó los seis duelos que disputó. España jugó al son de Gonzalo Villar.