DÉNIA (AGENCIAS). El virulento incendio forestal declarado durante la noche de este martes en la sierra de Segària de El Ràfol d'Almunia, al norte de la provincia, se ha quedado en un gran susto ya que ha logrado ser estabilizado después de calcinar "sólo" 43 hectáreas.
Según han explicado a EFE fuentes de Emergencias de la Generalitat, las 43 hectáreas quemadas se deben, mayoritariamente, a dos focos principales, el primero de los cuales se situaba cerca de viviendas y fue dado por controlado a primera hora de este miércoles.
Esto ha permitido el regreso de decenas de vecinos desalojados tanto de El Ràfol d'Almúnia como de la cercana Benimeli, concretamente en el camino que dirige a Las Antenas de Segària, en la urbanización Font Català, con alrededor de 40 personas, y en las casas de la zona alta cercana al cementerio de esta población de la comarca de la Marina Alta.
El segundo foco se ubica en una zona de más difícil acceso y a estas horas se da por estabilizado, aunque siguen trabajando en el lugar dos medios aéreos junto a brigadas forestales y bomberos del Consorcio Provincial de Alicante para tratar de darlo por controlado en las próximas horas.
Durante la noche han operado sobre el terreno ocho dotaciones de los bomberos del Consorcio Provincial de Alicante, tres unidades de las brigadas forestales con otras tantas autobombas, así como dos coordinadores forestales y un jefe de comarca del Centro de Prevención de Incendios Forestales, y en la zona han hecho guardia dos ambulancias.
Las labores de extinción de este fuego declarado anoche como 'situación 1' dentro del plan especial contra incendios se han visto acompañadas por una mejoría de las condiciones meteorológicas, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en la Comunitat Valenciana, ya que el viento ha ido amainando conforme avanzaba la madrugada.
De esta manera, las rachas han tenido una tendencia a ir girando a brisa, con lo que la humedad ha aumentado con respecto al martes, y la temperatura ha bajado varios grados centígrados para situarse a unos 24 al mediodía.
Este incendio forestal se declaró este martes sobre las 20.45 horas y creó una gran inquietud en la población porque las llamas alcanzaron altura y fueron visibles en numerosas localidades, como en Pego, Dénia, Orba y Benimeli.
Además, en un primer momento las condiciones meteorológicas en torno a la sierra de Segària eran "muy adversas" para las tareas de extinción por haber una temperatura nocturna de 24 grados, con rachas de viento de 30 kilómetros por hora y una humedad inferior al 30 por ciento, pese a la cercanía del litoral mediterráneo.
A estas circunstancias se sumaba que prácticamente se llevan dos meses sin lluvia en esta zona del norte de Alicante ya que se han contabilizado únicamente algo menos de 5 litros por metro cuadrado cuando lo habitual entre el 15 de septiembre y el 15 de noviembre en la sierra de Segària es que sean de 240 l/m2.
Incluso, en la cercana localidad de Pego ayer AEMET constató un registro histórico al alcanzarse por primera vez desde que se recaban datos, 1942, una temperatura de 31,2 grados centígrados después del 10 de noviembre.
En las primeras horas, Emergencias de la Generalitat Valenciana contabilizó cerca de doscientas llamadas por el miedo a las llamas, una situación de la que se hizo eco el president de la Generalitat, Carlos Mazón, quien colgó un mensaje en la red social X indicando que seguía "muy de cerca" la evolución de las llamas y donde destacaba "el trabajo incansable" de los bomberos del Consorcio Provincial de la Diputación de Alicante
