Almoradí y parte de la Vega Baja. Foto: APALICANTE. Ecologistas en Acción ha presentado una batería de alegaciones al Plan de Acción Territorial de la Vega Baja. De los 83 artículos que componen el documento matriz del PAT, Normativa, el colectivo ha aportado su postura para que se tenga en consideración a 26 de ellos. Entre sus propuestas se encuentra la supresión de algunos apartados de varios artículos, la adición, la modificación o texto alternativo en otras.
Esta normativa que ha estado expuesta durante tres meses para que los interesados presentaran alegaciones, tiene como objetivo “establecer un desarrollo territorial y urbanístico racional y sostenible”, dado que, según describe el documento, la Vega Baja la describe como de “gran fragilidad ambiental”. Fija una serie de condiciones para distintos supuestos urbanísticos en función de la zonificación en seis áreas en las que se ha dividido la comarca. Entre ellas se encuentra los parámetros para que se pueda ejecutar distintas construcciones y las que no se permite en la zona catalogada como suelo no urbanizable en la huerta de la Vega Baja, en los regadíos de secano y en los nuevos regadíos (los involucrados con el trasvase Tajo-Segura). También las condiciones que deben seguir la instalación de plantas fotovoltaicas, el suelo urbanizable que debe ejecutarse en menos de tres años, los suelos no urbanizables de protección ambiental, las piezas verdes de interés ambiental y los suelos no urbanizables del litoral regulados por el PATIVEL.
Ecologistas en Acción, en sus alegaciones insta a que se suprima un apartado del artículo 22 sobre suelos no urbanizables de protección ambiental donde se permite la instalación de alojamientos turísticos, de restauración y de ocio, aunque el PAT marque una serie de parámetros necesarios para que se permitan estas instalaciones. También solicita que se suprima para esta misma zona las obras, infraestructuras e instalaciones propias de las redes de suministro, transporte y comunicaciones.
Respecto a las condiciones para los sectores de suelo urbanizable, apoyan la propuesta del PAT de desclasificación de 25 sectores “manifiestamente insostenibles y contarios al modelo territorial propuesto en el PAT”. No obstante sugieren la supresión del apartado que recoge las excepciones basadas en la situación administrativa de esos proyectos urbanísticos. De este mismo modo insta a que se incluya como suelos no urbanizables “los sectores tanto los que no tengan programa de actuación aprobado como los que sí lo tengan aprobado y en vigor” en relación con la estrategia de extinción e integración en la infraestructura verde cuando los sectores “son manifiesta incompatibles con los criterios de sostenibilidad ambiental y territorial”.
Para la zona 4, la huerta histórica de la Vega Baja piden prohibir la cría intensiva de animales de granja debido, según esgrime el grupo ecologista, a la situación de contaminación por nitratos de las cuatro masas de agua subterráneas. Sugieren que en todo caso se permita la cría extensiva y en parcelas mínimas de 5.000 m2. Lo mismo sugiere para el apartado en el que se regula los usos y actividades en la zona de nuevos regadíos.
Sobre el resto de alegaciones, se dirigen a incluir o modificar aspectos de la estrategia sobre áreas frágiles del litoral, ejes urbanos estratégicos, objetivos específicos en materia de actividad económica, actividades económicas complementarias en la huerta de la Vega Baja con el impulso de la agricultura ecológica, la red viaria, y sobre criterios para la integración paisajística y territorial de las infraestructuras de residuos.
