ELCHE. Con el fin de dar a conocer las posibilidades que ofrecen la nanociencia y la nanotecnología, así como dar claves y consejos para favorecer el intercambio de conocimiento Universidad-Empresa en general y en este ámbito, el Parque Científico de la UMH organizó recientemente el webinar "De la nanociencia al mercado".
El investigador del Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid (ICMM) perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Pedro A. Serena, habló del proceso para pasar del laboratorio al mercado. En concreto, apuntó a claves sobre dónde emprender en España en relación a esta tecnología y apuntó que el gran potencial del país pasa por la nanociencia en recursos hídricos, en alimentación - al tratarse de una potencia productora-, en el empaquetado y en las energías renovables. Básicamente, en sectores donde los desarrollos interesen a la industria. No obstante, señaló que la competencia es muy dura en este campo y que el entramado legal crecerá a medida que se desarrolle en la Unión Europea.
Serena indicó que, dependiendo las diversas formas de las nanopartículas, son interesantes para campos diversos. "Si tienen forma esférica son interesante para el trabajo con células, pero si queremos una propiedad eléctrica potente es mejor que tengan muchas puntas". También puso ejemplos de cómo, incorporando nanopartículas de grafeno a la alimentación de los gusanos de seda, conseguían que los insectos produjeran un tejido de 10 a 100 veces más resistente. Las aplicaciones son múltiples.
En lo años 90 Estados Unidos tomó la delantera en la investigación en nanociencia pero, a partir de 2008 China superó a Estados Unidos en este tipo de descubrimientos y producción y ahora la triplica. La Unión Europea va por detrás y en España hay 10 veces menos patentes en nanotecnología que Almania. Es un campo por seguir creciendo.
Entre los problemas que a los que se deberían buscar soluciones en este campo está el de la toxicidad. "Es necesario estudiar cómo se comportan los materiales en muchos casos porque puede haber sorpresas y causar, por ejemplo, daños en células por acumulación. Y son partículas de muchas absorción". Otro de los puntos negativos es la contaminación y la acumulación de estas partículas en suelos. De hecho, asegura Serena, en algunos campos, como el de la cosmética, la nanociencia empieza a estar mal vista. "Por ello hay que seguir investigando, poner recursos para solucionar los problemas con el medio ambiente, certificar normas ISO y tener clara y ahondar en la prevención de riesgos laborales. La protección de consumidores y el debate en torno a cómo hacerlo, la educación y la formación desde Bachillerato son muy importantes".
Por su parte, la directora del Instituto de Bioingeniería de la UMH y cofundadora de la spin-off del Paruqe Científico de la UMH, Anfechem, Ángela Sastre, aportó datos de los desarrollos que llevan a cabo con estos materiales a escala molecular en la UMH.
Desde Anfechem realizan preparados de compuestos orgánicos y trabajan, esencialmente con unos materiales microscópicos muy versátiles: phthalocyaninas y perylene. Sastre, con experiencia de 25 años en este tipo de materiales, explica que son muy funcionales y versátiles, semiconductores. "Eso le da una versatilidad química enorme".
Ahora estudian materiales fotosintéticos artificiales para crear sistemas que simulan una fotosíntesis no natural. Las aplicaciones pueden pasar por las células fotovoltaicas. Estos materiales tienen ventajas y desventajas: son muy flexibles y se pueden incorporar a sustratos fácilmente, además de ser imprimibles de forma muy fácil, como si se tratara la tinta para un periódico. No obstante son menos estables que otros materiales. Estos materiales pueden contribuir a la evolución de las células solares y para la mejora de cargas de materiales transportados.
"Las aplicaciones, junto al grafeno, pueden darse en coches solares, chaquetas con dispositivos solares o en el láser. También como receptores de estrógenos para teñir células de cáncer", explica Sastre. De hecho, en Anfechem, las moléculas que crean se usan en materiales, terapias contra el cáncer, como biomarcadores, en aplicaciones de energía solar o en valor añadido para otras moléculas.
Por otra parte, Belén Carballeira, responsable de Marketing y Comunicación en Vegabaja Packaging, y Javier Mira, responsable de Oficina Técnica en Vegabaja Packaging explicaron el reto para encontrar una alternativa al plástico que recubre los pepinos para exportación.
En este campo, Vegabaja Packaging, proveedor de envases de cartón ondulado para el sector agrícola, entre otros, ha lanzado a través de la iniciativa IT Connecta del Parque Científico de la UMH, el reto para encontrar soluciones innovadoras aplicadas al cartón ondulado. Las personas o entidades interesadas en aportar soluciones viables pueden presentar su propuesta hasta el 15 de septiembre de 2020 a través de la web de IT Connecta, en el apartado Retos. Una vez terminado el plazo de inscripción, la compañía seleccionará la iniciativa más innovadora y se establecerá un acuerdo de colaboración. Durante el proceso de desarrollo del proyecto, Vegabaja Packaging ofrecerá apoyo técnico, muestras de materiales, soporte de marca y espacios físicos en sus instalaciones. Además, realizará una aportación inicial de 1.500 euros que podría ser aumentada en función de la solución y el conocimiento que se vaya a aportar. La compañía forma parte del Grupo Hinojosa, una de las principales corporaciones del sector a nivel europeo.
La tendencia a eliminar plásticos especialmente en la Unión Europea, hace que se empiecen a prohibir el uso de estos materiales, al tiempo que se puede desproteger el producto y poner en riesgo los envíos. ¿Qué problemas conlleva enviar productos sin film?: que las cajas de cartón se deterioran por la humedad que desprende el producto y que se merma la calidad por oxidación.
Asimismo, este factor favorece la deshidratación y la aparición de moho en el alimento. Para poner fin a este problema, Vegabaja Packaging, con el asesoramiento del Parque Científico de la UMH, busca startups, empresas o investigadores que aporten soluciones innovadoras para desarrollar un envase de cartón alternativo que conserve la calidad de los productos.
Por último, José María Lagarón, director de la Unidad Asociada de investigación CSIC-UJI en Tecnología de Polímeros y fundador de Bioinicia habló de sus proyectos y tecnlogía en marcha y de cómo ha evolucionado a lo largo del tiempo.
La firma nación en 2012, como una desarrolladora de tecnología y ahora cuenta con técnicas de automización electrohidrodinámicas y aerodinámicas para la producción de micro y nanopartículas. La empresa tiene una línea de negocio principal que se centra en el desarrollo, fabricación y comercialización de nuevos materiales.
Ahora trabajan con el empaquetado con alternativas al plástico, para reciclado orgánico. En un proyecto previo y la evolución de ese trabajo. Realizan desarrollos a escala industrial y crean productos más funcionales. Tienen un proyecto en la UJI y otro en colaboración con IATA. Estos trabajos de Bioinicia van enfocados a la línea bio en alimentación, cosmética, farmacia y medicina. Incluso han realizado aplicaciones de filtración contra la covid, financiadas por el Ivace.
La planta pionera que desarrollaron tenía una capacidad de 10.000 toneladas de nanomateriales y ahora van a multiplicar esa capacidad por 3,5 veces. Tendrán tres plantas adicionales. Una a finales de julio y otras dos en septiembre. Han logrado un crecimiento orgánico, sin incoporar capital de riesgo en la empresa y la última facturación alcanzó los 4 millones de euros. Ahora rozan los 6 millones y esperan a final de 2020 llegar a los 10 millones. Un salto que se ve reflejado en la firma después de que en 2019 dieran el salto a la bioingeniería. El 50% de la facturación es de productos manufacturados en la planta. 2020 ha supuesto un cambio de paradigma para ellos.
Entre otros proyectos pasados crearon la marca de ingeniería Fluidnatek para hacer procesado electrohidrodinámico. Esta marca ha permitido que la empresa creciera de forma orgánica para poner al servicio de centros de investigación equipos avanzados capaces de fabricar materiales novedosos hasta una escala de planta piloto. Con Fluidnatek lograron poner en marcha la primera planta del mundo con financiación bancaria de esta tecnología.
Las personas galardonadas son Marina Gomariz (TFG) y Víctor Crespo, Adrián López Murcia y José Alberto Jiménez en TFM.