Local de Ría de Vigo, en la calle Ángel Lozano, cerrado por jubilación. Foto: APALICANTE. La oferta hostelera del centro de Alicante sigue mostrando una gran efervescencia. No siempre con nuevas aperturas, como las que se han producido en los últimos meses en la avenida Alfonso X el Sabio con la apertura de Lucero's Coffe a escasos metros de la plaza o del 'renacimiento' de VAAR como el café Fresh & Nat, en la esquina con la calle Segura. También, por desgracia, en ocasiones se producen cierres de negocios históricos, que llevaban años en sus locales.
Es lo que ha sucedido a finales de este pasado verano con dos negocios históricos en el entorno de la citada avenida. Por un lado, el restaurante de cocina gallega Ría de Vigo, en la calle Ángel Lozano, que ha echado el cierre tras 33 años de servicio ininterrumpido. Por otro, la cafetería Camelia Café, que cambió de nombre y de propietario hace apenas un año tras una larga trayectoria conocido como Magnolia Café.
El caso del restaurante sea probablemente el más llamativo. Ría de Vigo abrió en el mismo bajo comercial donde ahora ha echado el cierre hace más de tres décadas, especializado en la cocina gallega (origen de sus propietarios). Desde el pasado agosto, un cartel en la puerta explica que han cerrado por jubilación (de su propietaria, pues la segunda generación se había incorporado plenamente a la gestión del establecimiento). Según ha podido saber Alicante Plaza, un inversor ha comprado el edificio completo, bastante antiguo, para reformarlo y promover nuevas viviendas. La operación se cerró hace un tiempo e incluía el bajo de Ría de Vigo, pero se pactó esperar a la jubilación de la propietaria para poner en marcha el proyecto.
En cuanto a Magnolia, abrió hace seis años en la avenida Alfonso el Sabio con la calle Belando, y en su momento encarnó una oferta rompedora que poco a poco se ha ido estandarizando: una cafetería y pastelería con encanto y una zona de juegos infantil, para permitir la conciliación de las madres por las tardes. Tras abrir camino Magnolia (su segundo local, en la zona de Playas, sigue funcionando), han proliferado locales similares en apenas una manzana: dos de ellos, sin ir más lejos, también en Ángel Lozano: La Dent Sucrée y Mon P'ti Café.
A mediados de 2018, el propietario de Magnolia traspasó el local a un inversor argelino, que lo ha mantenido abierto algo más de un año antes de cerrar definitivamente este otoño. Al contrario que en el caso de Ría de Vigo, donde el local ha pasado a manos del nuevo dueño del edificio y se verá afectado por el proyecto inmobiliario, el bajo comercial de la cafetería conocida en su último año como Camelia ha pasado a engrosar la oferta de locales disponibles para alquiler en el centro. Lo comercializa la inmobiliaria Casamayor, que recientemente ha reformado a fondo su propio local en la calle Ángel Lozano para adaptarlo a su nueva imagen corporativa.
