Vista de la costa y ciudad de Benidorm. Foto: RAFA MOLINA BENIDORM. La ciudad de Benidorm sigue cogiendo pulso después de la crisis provocada por la pandemia. Tres años después de la peor temporada que se recuerda debido a las restricciones a la movilidad y el uso de medidas sanitarias, la ciudad ha remontado el vuelo. Y eso que las comparaciones son con 2019, año récord para el turismo. De este modo, en la primera quincena de julio ha registrado una ocupación hotelera del 88,1%, según los datos aportados por la patronal del sector, Hosbec.
Con ello roza el de 2019 para la misma fecha, que fue del 88,6%. No obstante, la previsión de los empresarios es mejorar los resultados de aquel año con una estimación del 85,6% (la cifra de 2019 fue del 85,2%). Además, esperan que se pueda superar con las reservas de última hora.
En la primera quincena de julio también se han dejado una pequeña parte de lo alcanzado en la segunda de junio, cuando la ocupación marcó un 88,6%. De todos modos, se trata de datos positivos que se quedan a las puertas de un lleno técnico.
Uno de los aspectos que más se vio afectado debido a la pandemia fue el mercado internacional. En este caso, el británico ya que es el que más cuota tiene. Sin embargo, desde hace unos meses la recuperación es un hecho. En la actualidad el extranjero representa al 55,6% del total. Con todo, el mercado nacional lidera la tabla con el 44,4%, el británico llega al 36,9%, seguido por los mercados portugués (5,2%), irlandés (1,9%), neerlandés y belga, ambos con un 1,8% y el rumano (1,5%). El resto de mercados emisores no superan el 1% de representatividad en ningún caso.
Por lo que respecta a la categoría de los hoteles, cuanto más estrellas, más ocupación. Así se desprende del desglose efectuado por Hosbec donde analizan los de cuatro, tres y dos estrellas. Los primeros estuvieron al 88,1%, los segundos al 88,6% y los terceros al 83,6%. Los dos últimos suben con respecto a 2019 (0,8 y 1,4 puntos respectivamente). Mientras que los de superior categoría han bajado 1,4 puntos.
Al margen de la capital turística, la zona de la Costa Blanca (sin incluir Benidorm) anota una ocupación del 82,7% durante la primera quincena de julio, superando así los registros anotados en 2019 (81,1%) y los de la quincena anterior en dos puntos porcentuales. En los municipios concretos de l' Alfàs del Pi registró un 81,2%, Altea 87,8% y Calpe un 87,3%. Con previsiones para sobre el 83% para l'Alfàs y Altea, y superando el 77% en el caso de Calpe.
Finalmente, para la ciudad de Alicante, los hoteles asociados a Hosbec remiten una ocupación para la primera quincena del mes del 89,7%, minorando los datos respecto a la quincena anterior en 3,8 puntos porcentuales.
