Foto: RAFA MOLINA. BENIDORM. No hay verano sin polémica en Reino Unido que salpique a Benidorm. Este año no iba a ser una excepción. La prensa británica se hacía eco esta semana del revuelo que nació en redes sociales a raíz de tener que cumplir con las normas para entrar a territorio Schengen, en este caso, España. Una situación que deriva de la salida del país anglosajón de la UE y que no se escapa a pesar de tener tan buena relación comercial fruto del interés por viajar a lugares como la Costa Blanca. Pero en Benidorm están tranquilos.
Alrededor de la mitad de los turistas que recalan en la ciudad de los rascacielos es de Reino Unido. Se trata de un importante mercado para el municipio, cuya dependencia se ha puesto de relieve en la pandemia. Las restricciones a la movilidad dejaron fuera de mapa a los británicos y la mitad de hoteles permanecieron cerrados a la espera de su vuelta.
Pues bien, desde la patronal hotelera Hosbec y desde Visit Benidorm explican que las exigencias para viajar a España ya las cumplen. Como ha explicado Alicante Plaza, el visitante tendrá que demostrar solvencia económica que le permita gastar 100 euros por día de estancia (unas 85 libras), pero no les obliga a desembolsarlos. Además, normalmente el turista no tiene oposición si enseña el comprobante de la reserva de alojamiento o una carta de invitación.
"No tiene un coste real", remarcan desde Visit, mencionando que precisamente con la reserva de la estancia es más que suficiente por lo que el problema queda en gran parte diluido, al menos, para la mayoría de aquellos que viajan a Benidorm, que suele ser con alojamiento ya previsto. Otro de los escollos salvados está en la turoperación, como recuerdan desde Hosbec, que al tener la comercialización de las vacaciones por adelantado, la nomra "ya la cumplen". No obstante, desde la asociación reseñaron que cualquier tipo de agitación de la opinión pública puede afectar en el ánimo de compra.
En resumidas cuentas, como otros países fuera del espacio Schengen, Reino Unido tendrá que cumplir con los requisitos de entrada a España: demostrar que tiene alojamiento para su estancia en el país o una carta de invitación por el que le vaya a acoger. Al mismo tiempo, hay otros condicionantes, como el seguro de viaje, el itinerario si es organizado, un formulario sanitario y el certificado de vacunación covid además del billete de salida de la zona Schengen en un máximo de 90 días desde la entrada.
Al eco de este revuelo, la app financiera Revolut emitió un informe sobre el gasto de los turistas británicos en España durante sus vacaciones en 2021. La empresa cuenta con 4,8 millones de clientes en Reino Unido y concluye que gastaron una media de 75,74 libras al día en sus vacaciones en nuestro país, es decir, un 10,89% menos que lo exigido por el Ministerio, tal y como afirman en un comunicado.
El dato es más bajo aún en los usuarios de entre 18 y 24 años con 40,29 libras de media al día para un viaje de siete días. En el lado contrario están los de la edad comprendida entre los 45 y 54 años, que se dispara a los 119,6 euros. Aunque como se ha dicho, siempre piden acreditar solvencia, no que se gasten finalmente en el destino. Sin embargo, estas cifras dan una visión de cómo es el perfil de turista británico en España.
Entre las curiosidades de dicho estudio, mencionan que el británico de la generación Z gastó un 18% más en hoteles en junio de este año con respecto a 2019, un 24% más en alquileres de coches, un 4% más en atracciones turísticas y un 16% más en bares, cafeterías y restaurantes. "Los datos de Revolut sugieren que muchos están aprovechando sus vacaciones comprando moda en el extranjero, ya que la transacción media en las tiendas de ropa ha subido un 31%. Sin embargo, el gasto en billetes de avión y taxis ha bajado un 1% desde los niveles anteriores a la pandemia", explica la empresa.
